Rafael Devers encara un difícil proceso de adaptación en la Liga Nacional


San Francisco, California — 2 de julio de 2025. – El proceso de adaptación de Rafael Devers a su nuevo equipo en la Liga Nacional, los San Francisco Giants, está resultando más complejo de lo esperado.

A más de dos semanas del sorpresivo cambio que lo sacó de los Boston Red Sox —donde era considerado el rostro de la franquicia— el antesalista dominicano no ha logrado encontrar su ritmo ofensivo habitual.

Desde su llegada a San Francisco, Devers ha enfrentado múltiples desafíos que han impactado su rendimiento. En 14 partidos disputados con los Giants, apenas batea para promedio de .204 (11 hits en 54 turnos), con un porcentaje de embasarse (OBP) de .306 y slugging (SLG) de .370, cifras que se traducen en un OPS de .677 y un OPS+ de 95, es decir, cinco puntos por debajo del promedio de la liga en ese período. Durante ese tramo ha conectado dos cuadrangulares y remolcado cinco carreras, acumulando un WAR negativo de -0.1.

Este desempeño contrasta marcadamente con lo que mostró en los 73 juegos disputados con Boston en lo que va de temporada, donde registró una línea ofensiva de .272 de promedio, OPS de .905, 15 jonrones y 58 impulsadas.

Las razones detrás de esta caída parecen ir más allá de lo meramente técnico. Según trascendió, la salida de Devers de Boston estuvo acompañada de rumores sobre tensiones internas relacionadas con su actitud, los cuales fueron parcialmente confirmados por la gerencia del equipo durante una rueda de prensa.

Desde el canje, ni los Red Sox ni los Giants han mostrado mejoras en su desempeño colectivo, con ambos conjuntos sumando más derrotas que victorias. En el caso de San Francisco, el bajo rendimiento ofensivo generalizado también ha afectado a Devers, quien no cuenta con suficiente protección en la alineación para explotar su potencial ofensivo.

Además, la transición del Fenway Park al Oracle Park representa un cambio significativo para cualquier bateador, especialmente uno zurdo como Devers. El parque de los Giants es conocido por sus dimensiones poco favorables para este tipo de jugadores, lo cual también podría estar influyendo en su bajo rendimiento inicial.

No obstante, los fundamentos de su swing permanecen sólidos. Según datos de Statcast, Devers se mantiene en el percentil 91 en cuanto a calidad de contacto, lo que sugiere que su talento sigue intacto y que es cuestión de tiempo para que recupere su mejor forma.

Aunque el proceso de adaptación podría prolongarse, en San Francisco confían en que el Devers que dominó la Liga Americana volverá a brillar pronto en la Liga Nacional.

Comentarios
Difundelo