Reacciones internacionales a la controvertida victoria electoral de Nicolás Maduro
Caracas, Venezuela, 29 de julio – La proclamación de Nicolás Maduro como vencedor en las elecciones presidenciales de Venezuela, según el Consejo Nacional Electoral (CNE) controlado por el chavismo, ha desatado una ola de reacciones internacionales inmediatas. Países como Estados Unidos, Chile y España han cuestionado la legitimidad de los resultados, reflejando una creciente preocupación sobre la transparencia del proceso electoral venezolano.
Preocupaciones desde Washington
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, expresó desde Tokio, donde se encuentra de gira, las “serias preocupaciones” de la administración Biden sobre los resultados. “Los resultados anunciados no reflejan la voluntad o los votos del pueblo venezolano”, declaró Blinken, subrayando la importancia de un conteo justo y transparente de cada voto. Además, advirtió que “la comunidad internacional está observando esto muy de cerca y responderá en consecuencia”.
Reacciones desde América Latina
Chile y su firme postura
El presidente de Chile, Gabriel Boric, fue uno de los primeros en cuestionar públicamente los resultados electorales. “El régimen de Maduro debe entender que los resultados que publica son difíciles de creer. La comunidad internacional y sobre todo el pueblo venezolano, incluyendo a los millones de venezolanos en el exilio, exigimos total transparencia de las actas y el proceso, y que veedores internacionales no comprometidos con el Gobierno den cuenta de la veracidad de los resultados”, expresó Boric en sus redes sociales.
La respuesta desde Caracas no se hizo esperar. El canciller venezolano, Yvan Gil, replicó de manera contundente: “Quizás su incompetencia es la causa de desconocer que los hijos de Bolívar y de Chávez no necesitamos su devaluado reconocimiento, aquí si derrotamos el fascismo con votos y con apoyo popular, y además somos libres de tutelajes, cosa que lastimosamente su Gobierno no puede decir jamás. ¡Ocúpese de sus problemas!”.
España pide transparencia
El ministro de Asuntos Exteriores de España, José Manuel Albares, también se pronunció, solicitando “total transparencia” en los resultados de las elecciones venezolanas. En una entrevista con la Cadena SER, Albares pidió la publicación de las actas de las mesas electorales para que los resultados puedan ser verificados. Destacó la presencia de observadores internacionales como el Centro Carter y Naciones Unidas, cuyos informes están siendo esperados con interés por el gobierno español.
Albares, en contacto constante con el Alto Representante de la UE, Josep Borrell, y cancilleres latinoamericanos, afirmó que España no tenía ningún candidato en estos comicios y que su objetivo es asegurar que el proceso electoral se desarrolle con calma, tranquilidad y libertad.
Reacciones desde Colombia
El canciller colombiano, Luis Gilberto Murillo, solicitó una auditoría independiente de los resultados electorales. “Hacemos un llamado para que, a la mayor brevedad, se proceda con el conteo total de los votos, su verificación y auditoría de carácter independiente”, expresó Murillo en la red social X. Desde la llegada de Gustavo Petro al poder, Colombia ha intentado mediar en la crisis política venezolana, y esta declaración subraya ese compromiso.
Postura de Perú, Uruguay y Costa Rica
Gobiernos de otros países como Perú, Uruguay y Costa Rica han manifestado abiertamente su desconfianza en los resultados electorales. El ministro de Exteriores peruano, Javier González-Olaechea, condenó lo que describió como una “sumatoria de irregularidades con voluntad de fraude por parte del gobierno de Venezuela”. Asimismo, Perú decidió llamar a consultas a su embajador en Caracas. Uruguay y Costa Rica se unieron a estas declaraciones, señalando posibles irregularidades en el proceso.
Antes de que se anunciaran los resultados, los cancilleres de Argentina, Costa Rica, Ecuador, Guatemala, Panamá, Paraguay, Perú, República Dominicana y Uruguay emitieron un comunicado conjunto exigiendo garantías de que los resultados reflejaran la voluntad popular y pidieron un conteo transparente de los votos.
Apoyo desde el Eje Bolivariano
En contraste, los países del denominado “eje bolivariano” expresaron su apoyo y felicitaciones a Nicolás Maduro. Presidentes como Miguel Díaz-Canel de Cuba, Daniel Ortega de Nicaragua, Luis Arce de Bolivia y Xiomara Castro de Honduras enviaron mensajes de felicitación, destacando la “victoria histórica” y la “valentía del pueblo venezolano”.
Cuba
El presidente cubano, Miguel Díaz-Canel, transmitió sus felicitaciones a Maduro por el “histórico triunfo electoral logrado, tras una impresionante demostración del pueblo venezolano”. Díaz-Canel reafirmó la solidaridad de Cuba y destacó que “hoy triunfó la dignidad y el valor del pueblo venezolano sobre presiones y manipulaciones”.
Nicaragua
La pareja presidencial nicaragüense, conformada por Daniel Ortega y Rosario Murillo, envió una carta a Maduro en la que saludan la “gran victoria” del “pueblo heroico”. En la misiva, Ortega y Murillo hacen referencia al “comandante eterno”, Hugo Chávez, en cuyo cumpleaños se celebraron las elecciones.
Bolivia y Honduras
Luis Arce, presidente de Bolivia, felicitó a Maduro y al pueblo venezolano, destacando que “se haya respetado la voluntad del pueblo venezolano en las urnas”. Evo Morales, expresidente boliviano, también elogió la victoria de Maduro como un triunfo contra las adversidades externas. Xiomara Castro, presidenta de Honduras, envió una “felicitación y saludo democrático, socialista y revolucionario” a Maduro, reafirmando el apoyo de su país.
El Silencio de Brasil y México
En medio de esta ola de reacciones, Brasil y México han mantenido un silencio notable. La atención se centra especialmente en Brasil, ya que su canciller, Celso Amorim, fue uno de los observadores internacionales del proceso, formando parte del Grupo de Puebla junto con figuras como el expresidente español José Luis Rodríguez Zapatero y el dominicano Leonel Fernández.
El presidente brasileño, Luiz Inácio Lula da Silva, la semana pasada, instó a Maduro a respetar el proceso electoral y aceptar una posible derrota, en declaraciones que sorprendieron por su tono inusual. Lula manifestó haber sentido “miedo” al escuchar a Maduro advertir que una victoria del opositor Edmundo González podría derivar en “un baño de sangre” o “una guerra civil fratricida”.