República Dominicana podría sufrir consecuencias ante la caida de los mercados bursátiles, en especial en EEUU y Europa
Santo Domingo, 6 de agosto – En un análisis reciente, el economista Miguel Collado Di Franco ha expresado su expectativa de que la Reserva Federal de Estados Unidos (FED) tomará medidas antes de septiembre para ajustar la política monetaria, posiblemente mediante una reunión de emergencia.
Según Collado Di Franco, la economía estadounidense, que depende en gran medida de la política fiscal, está comenzando a mostrar signos de debilidad estructural, especialmente después de la caída significativa en los mercados bursátiles de Wall Street, Europa y Asia, un evento que muchos han denominado como el «lunes negro».
Collado Di Franco anticipa que la FED podría reducir las tasas de interés, incluso sin alcanzar primero la meta de baja inflación. Esta acción podría ser una respuesta a las expectativas de los analistas que prevén una estanflación inminente en la economía estadounidense, caracterizada por un bajo crecimiento económico, deterioro de los indicadores de empleo y una alta inflación. Esta situación obligaría a la FED a intervenir para estabilizar la economía.
La República Dominicana, según Collado Di Franco, no estará exenta de los efectos de estas políticas, debido a su vínculo estrecho con la economía estadounidense a través del turismo, las zonas francas y las remesas.
Además, es probable que los precios nacionales, incluyendo los de las materias primas, se mantengan elevados, lo que podría tener un impacto negativo en la economía local. El vicepresidente ejecutivo del Centro Regional de Estrategias Económicas Sostenibles (CREES) subraya que estos factores podrían influir negativamente en la economía dominicana.
Sin embargo, otros economistas, como Richard Medina y Ellen Pérez Ducy, sugieren que es prudente esperar antes de sacar conclusiones definitivas sobre el impacto en la República Dominicana.
Medina, por ejemplo, señala que los efectos inmediatos en la economía dominicana podrían ser mínimos, destacando que algunos índices bursátiles estadounidenses, como el Nasdaq, ya han mostrado señales de recuperación, aunque permanecen en territorio negativo.
Medina también indica que si la Reserva Federal baja su tasa de política monetaria en septiembre, esto podría hacer que los activos en pesos dominicanos se vuelvan más atractivos en comparación con los activos en dólares estadounidenses.
Esto, a su vez, podría permitir al Banco Central de la República Dominicana reducir su tasa de interés, aliviando la presión sobre el precio del dólar, lo cual beneficiaría tanto a las empresas como a las familias dominicanas.
Sin embargo, advierte que una desaceleración significativa en la economía estadounidense podría resultar en una disminución de las remesas, menos turistas y una menor demanda de exportaciones dominicanas.
Pérez Ducy, por su parte, sugiere que es necesario esperar para ver si la situación actual representa una pequeña corrección o un problema más grave. Ella advierte que una recesión prolongada o un negativismo persistente en los mercados podrían afectar negativamente las actividades de las zonas francas y el turismo, aunque esto podría tardar en manifestarse.
Además, el economista Luis Vargas también ha compartido sus perspectivas sobre la situación económica global. Según Vargas, el Financial Times ha señalado una posible recesión en Estados Unidos y su impacto negativo en los mercados financieros internacionales.
Él advierte sobre una posible depreciación del dólar y una posible subida del precio del oro en los mercados globales. Vargas también menciona el riesgo de una crisis política interna en Estados Unidos, que podría agravar aún más la situación económica mundial.
Vargas destaca que la República Dominicana podría enfrentar desafíos adicionales debido a la disminución en el acceso a capitales prestados, inversiones extranjeras directas y donaciones, lo cual podría empeorar el déficit en las cuentas comerciales, corrientes y fiscales del país.
También critica la gestión de subsidios y transferencias de capitales en el sector energético, así como la emisión de valores, señalando estos factores como agravantes de la situación económica.
Collado Di Franco ha advertido sobre los peligros de aplicar reformas fiscales estrictas en la República Dominicana, como las recomendadas por el FMI, que podrían incluir aumentos en las tasas impositivas y en el ITBIS.
Estas medidas, según él, podrían tener un impacto negativo, especialmente si se implementan durante un periodo de desaceleración económica en Estados Unidos. Por otro lado, Vargas sugiere que las reformas propuestas por el gobierno de Luis Abinader podrían ser beneficiosas, siempre y cuando se basen en datos y argumentos sólidos y se enfoquen en mejorar la calidad de vida de la población.
En un contexto internacional, los mercados europeos, como el Ibex 35 de España, también han experimentado caídas debido a los temores de una recesión en Estados Unidos y a los datos desfavorables sobre el empleo. Estos eventos subrayan la naturaleza interconectada de las economías globales y la importancia de monitorear las políticas monetarias y fiscales en las principales economías del mundo.