Revelan que un sospechoso de la muerte de Moise no será deportado a Haití
Puerto Príncipe, 1 dic (EFE).- El ex primer ministro de Haití Claude Joseph afirmó este sábado que el exmilitar colombiano Mario Antonio Palacios, supuesto implicado en el asesinato del presidente haitiano Jovenel Moise y detenido en Jamaica, será deportado a su país el lunes próximo.
Joseph escribió en su cuenta de Twitter que el Gobierno haitiano no ha proporcionado «pruebas suficientes» para establecer la participación del mercenario en el asesinato de Moise, perpetrado el 7 de julio del año pasado en su casa particular de Puerto Príncipe por un comando que no encontró resistencia.
«Es un duro golpe para la investigación. Lamentablemente, el equipo actual (Gobierno haitiano) no ha realizado ningún seguimiento, aunque las autoridades colombianas me han asegurado su cooperación. No hay voluntad política para avanzar en la investigación del asesinato de Jovenel Moise», afirmó Joseph, destituido en noviembre como ministro haitiano de Relaciones Exteriores.
El colombiano Palacios, supuesto integrante del comando acusado de asesinar al presidente haitiano, fue detenido en Jamaica en octubre pasado.
El magnicidio de Moise fue cometido, según las pesquisas, por un comando de mercenarios que irrumpieron en la residencia presidencial en la madrugada del 7 de julio sin hallar resistencia.
Joseph era primer ministro interino y canciller cuando ocurrió el magnicidio.
Del grupo que supuestamente perpetró el ataque fueron arrestados 18 exmilitares colombianos y 2 haitiano-estadounidenses, mientras que otros 3 colombianos murieron en tiroteos con la Policía.
La Policía Nacional de Haití publicó en julio un anuncio de búsqueda y captura contra Palacios, supuesto integrante del comando acusado de asesinar al presidente Jovenel Moise.
De acuerdo a datos de la investigación, Palacios había entrado a la residencia de Moise al momento del magnicidio y huyó.
Las investigaciones en torno al suceso parecen estar en un punto de paralización en Haití.
La esposa de presidente, Martine Moise, resultó herida en el ataque y fue intervenida quirúrgicamente en Estados Unidos. En el funeral de Moise denunció que la oligarquía del país es, supuestamente, la responsable del crimen.