Sin excusas para tantas muertes en feriado de fin de año
Guarionex Rosa
No parece que haya excusas para que durante el feriado de Navidad y Año Nuevo ocurrieran tantas muertes por accidentes de carretera, más que el año pasado, y pese a todo el aparataje policial, militar y publicitario que anticipó que las pasadas serían unas festividades más tranquilas.
Que 90 menores de edad se intoxicaran durante la jornada de celebración, que tiene como eje la conmemoración del nacimiento de Jesucristo, habla mal de la percepción que se tiene de que el dominicano es un país alcoholizado, en el cual se enseña a los niños más a beber que a estudiar.
Lo cariacontecido que se hallaba el general Luis Manuel Méndez cuando relató el jueves las últimas ocurrencias y su evidente frustración porque no se cumplieron las metas esperadas, habla de que, tras tantos años de servicio público, como un apreciado hombre al frente del COE, se ha fracasado.
Se trata de que ocurrieron 262 accidentes con 206 motoristas involucrados. En total fueron 42 personas las fallecidas en accidentes de tránsito, intoxicaciones alimentarias e intoxicaciones alcohólicas, una cifra de fallecimientos sumamente alta en comparación a la población del país que se movilizó.
El fracaso es de los gobiernos que no han podido frenar al motoconchismo irresponsable, no han impuesto los cascos protectores al conductor de la motocicleta y a su pasajero como se hace en los países asiáticos y han permitido que familias enteras viajen en una motocicleta sin los cascos seguros.
Que se registraran 29 muertes en hechos de violencia y accidentes de tránsito en los cuales el factor alcohol tuvo mucho que ver, recordó la estadística de que el año 2023 fueron menos los casos pese que en el feriado pasado se adoptaron mucho mayores medidas de seguridad.
En lo que trata de ser una respuesta al editorial del Listín Diario “la epidemia mortal de las dos ruedas”, el director de la DIGESETT, Francisco Osoria de la Cruz se declaró incapaz de limitar el horario de las motocicletas, ya que no es un tema de la institución limitar la circulación de vehículos del público.
Los motoristas han escalado un rango político desde hace mucho tiempo. Hasta se consagró el día del motoconchista, un invento que un vocero del populismo propuso. El motoconchismo tiene su sitio cuando se tocan los temas nacionales, o hasta en un almuerzo presidencial.
Con las elecciones tan lejos como en el 2028, ahora sería el momento para ponerle freno a las pretensiones del motoconchismo, imponer seguro a las motocicletas, cascos protectores, aunque militares y policías no los usan, limitar los ocupantes -todos con cascos – y a que no circulen por las aceras que es ahora una mala costumbre en medio del caos del tránsito.
Las tantas muertes ocurridas en el feriado pasado, estropea la noción de que en la República Dominicana se respetan los derechos humanos. Con una democracia funcional y con libre expresión del pensamiento, es contradictorio que no sea el gobierno quien atropella, sino el ciudadano que no obedece la ley.
Listin Diario
