Sudáfrica despliega 10.000 militares para ayudar en las zonas de inundaciones
Johannesburgo, 18 abr (EFE).- El Ejército de Sudáfrica confirmó este lunes que ha desplegado a unos 10.000 militares para asistir en los trabajos de emergencia a los miles de afectados por las inundaciones que asolan el este del país desde la semana pasada y que ya causaron al menos 443 víctimas mortales.
Las tareas de las que se está ocupando este contingente, según señalaron hoy en un comunicado las Fuerzas de Defensa Nacionales de Sudáfrica (SANDF, por sus siglas en inglés), incluyen, entre otros, el levantamiento de alojamientos temporales para los afectados, el apoyo a los equipos médicos de la zona, la provisión de agua potable y el despliegue de técnicos para restaurar las redes eléctricas.
El área afectada por estas devastadoras inundaciones -que se desencadenaron por las lluvias torrenciales que empezaron a caer en la parte oriental del país hace una semana- es la provincia de KwaZulu-Natal.
Según afirmó el jefe de gobierno de esta región, Sihle Zikalala, en una rueda de prensa este domingo, estas inundaciones están «entre las peores catástrofes caídas sobre la provincia de KwaZulu-Natal en mucho tiempo».
El último balance oficial de víctimas, correspondiente a la tarde del domingo, asciende a 443 muertos y 63 desaparecidos.
Las autoridades locales estiman que los daños para la provincia son millonarios y que unas 40.000 personas se han visto afectadas en total por las inundaciones.
El Gobierno sudafricano declaró el miércoles pasado el estado de desastre en la provincia y el presidente del país, Cyril Ramaphosa, ha cancelado un viaje oficial que tenía previsto realizar este martes a Arabia Saudí para seguir supervisando la situación en el este del país.
La zona más afectada por las lluvias torrenciales es el área de Durban, que es la ciudad más importante de KwaZulu-Natal y la tercera más grande de Sudáfrica.
Las inundaciones golpearon especialmente las barriadas de asentamientos informales de sus alrededores, algunas de ellas arrasadas por completo por el agua y los corrimientos de tierra.
También las infraestructuras de electricidad, transporte, agua corriente y muchos centros médicos se han visto severamente dañados.
KwaZulu-Natal viene experimentando un aumento de esta clase de fenómenos meteorológicos graves en los últimos años.
Los más graves en los tiempos recientes se dieron en 2019, cuando las lluvias torrenciales e inundaciones dejaron unos 80 muertos en esta misma época del año.
Esta provincia lidia aún, además, con la desolación causada por los graves disturbios que Sudáfrica vivió en julio de 2021 y que se vivieron con mayor intensidad precisamente en KwaZulu-Natal, donde se registraron 275 de los 354 muertos que dejaron aquellos incidentes.