Una de las 2 víctimas del ataque a sinagoga en Manchester fue baleada accidentalmente por la policía
MANCHESTER, Inglaterra, 3 octubre.— Uno de los dos judíos que murieron en un atropello y un apuñalamiento en una sinagoga en la ciudad inglesa de Manchester parece haber sido baleado accidentalmente por un policía mientras intentaba impedir que el agresor entrara al recinto, indicaron las autoridades el viernes.
Según la policía, el feligrés Adrian Daulby, de 53 años, y el guardia de seguridad Melvin Cravitz, de 66, murieron tratando de prevenir el ataque del jueves a la sinagoga de la congregación Heaton Park durante el Yom Kipur, el día más sagrado del calendario judío. Otras tres personas están hospitalizadas en estado grave.
La policía disparó y abatió a un sospechoso siete minutos después de que embistió con un auto a peatones en el exterior de la sinagoga y luego los atacó con un cuchillo en un incidente que la policía calificó como un acto de terrorismo. El agresor portaba lo que parecía ser un cinturón explosivo, que resultó ser falso.
Un patólogo determinó provisionalmente que Daulby presentaba una herida de bala. Dado que el agresor no llevaba armas de fuego, la lesión puede haber sido “una consecuencia trágica e imprevista” de la acción policial, señaló el jefe de la Policía Metropolitana de Manchester, Stephen Watson.
Daulby y otro hombre, que fue hospitalizado con una herida de bala, estaban entre los fieles que fueron aclamados como héroes por bloquear la puerta para impedir que el atacante entrara, dijo Watson.
El asesino, blandiendo un cuchillo grande, gritó: “Esto es lo que obtienen por matar a nuestros hijos” mientras intentaba romper la puerta, dijo Alan Levy, presidente de los fideicomisarios de la sinagoga, a ITV News.
La familia de Daulby dijo que su “acto final fue de un profundo coraje”. La familia de Cravitz informó que están tratando de sobrellevar la impactante pérdida de un hombre que “haría cualquier cosa para ayudar a cualquiera”.
La policía ha calificado el ataque como un acto de terrorismo, pero aclaró que aún trabaja para identificar un motivo. El ataque ocurrió en medio de altas tensiones por la guerra de Israel contra Hamás en Gaza.
Decenas de personas se reunieron bajo la lluvia cerca de la sinagoga el viernes para una vigilia, en la que el viceprimer ministro David Lammy fue abucheado por miembros de la multitud que acusaron al gobierno de permitir que el antisemitismo se propague.
El rabino jefe, Ephraim Mirvis, líder del judaísmo ortodoxo en el Reino Unido, afirmó que el atentado fue el resultado de “una ola implacable de odio hacia los judíos” tanto en las calles como en internet.
“Este es el día que esperábamos no ver nunca, pero que en el fondo sabíamos que llegaría”, escribió en redes sociales.
Las autoridades no conocían al agresor
La policía identificó al agresor como Jihad Al-Shamie, un ciudadano británico de 35 años de ascendencia siria que llegó al país de niño y obtuvo la nacionalidad en 2006.
La policía dijo que el crimen está siendo investigado como un ataque terrorista. La secretaria del Interior, Shabana Mahmood, indicó que el agresor no era conocido por la policía ni por Prevent, un programa nacional contra el terrorismo que intenta identificar a personas en riesgo de radicalización. Una persona familiarizada con la investigación dijo que Al-Shamie estaba en libertad bajo fianza por una presunta violación en el momento del ataque. Solicitó anonimato para divulgar información sobre la investigación.
Según Mahmood, “es demasiado pronto para decir” si el atacante actuó solo o formaba parte de una célula. Las autoridades arrestaron el jueves a tres personas sospechosas de preparar o cometer actos de terrorismo —dos hombres de unos 30 años y una mujer de 60 años.
Vecinos del agresor en el suburbio de Prestwich, a unos 3 kilómetros (2 millas) de la sinagoga, aseguraron que la familia de Al-Shamie llevaba años viviendo en esa casa. Varios dijeron haber visto a Al-Shamie levantando pesas y haciendo ejercicio en el patio trasero.
En un comunicado en Facebook, la familia del agresor condenó el “acto atroz que tuvo como objetivo a civiles pacíficos e inocentes”.
“Nuestros corazones y pensamientos están con las víctimas y sus familias, y rezamos por su fortaleza y consuelo”, agregó el comunicado.
Líderes condenan el ataque
Líderes religiosos y políticos condenaron el ataque y se comprometieron a tranquilizar a la comunidad judía británica, que cuenta con unos 300.000 miembros.
La policía anunció que habrá más agentes en las calles de Manchester el viernes y durante el fin de semana a fin de tranquilizar a la comunidad.
El primer ministro Keir Starmer, quien visitó el lugar del ataque el viernes por la mañana acompañado por su esposa Victoria, declaró: que “este fue un ataque terrible, un ataque terrorista para infundir miedo. Atacar a los judíos por el mero hecho de ser judíos”.
“Es fundamental que hoy todo el país se una, personas de todas las religiones y sin religión, para apoyar y solidarizarse con nuestra comunidad judía”, declaró.
La obispa anglicana Sarah Mullally, quien fue nombrada el viernes la próxima líder de la Iglesia de Inglaterra, dijo que la “horrible violencia” era un signo de “odio que surge a través de las fracturas en nuestras comunidades”.
“No podemos permitir que el odio y el racismo de cualquier tipo nos dividan”, afirmó.
Los incidentes antisemitas registrados en el Reino Unido repuntaron de forma drástica desde el ataque liderado por Hamás sobre el sur de Israel el 7 de octubre de 2023 y la guerra de Israel contra el grupo insurgente en Gaza, según el Community Security Trust, un grupo de defensa de los judíos británicos.
En la primera mitad del año se reportaron más de 1.500 incidentes, el segundo dato semestral más alto por detrás del récord establecido en el mismo período del año anterior.
Piden cancelar marchas propalestinas
Algunos políticos y líderes religiosos afirmaron que las manifestaciones propalestinas que se celebran de forma regular desde el inicio de la guerra en Gaza, han contribuido a propagar el odio hacia los judíos. Las protestas han sido pacíficas, pero algunos dicen que consignas como “Del río al mar, Palestina será libre” incitan a la violencia. Otros, incluyendo judíos que apoyan las protestas, afirman que quieren un alto el fuego, el fin del sufrimiento de los palestinos en Gaza y la liberación de los rehenes israelíes retenidos por Hamás.
El primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y sus partidarios acusan de antisemitas a los críticos de Israel o de su conducta en la guerra en Gaza. Los críticos lo ven como un intento de sofocar incluso la crítica legítima.
Mirvis instó a las autoridades a “controlar estas manifestaciones. Son peligrosas”.
Algunos también sostienen que el reconocimiento del Estado palestino por parte del Reino Unido este mes ha envalentonado el antisemitismo, una afirmación que el gobierno rechaza. Lammy fue interrumpido por abucheos y gritos de “debería darte vergüenza” cuando tomó la palabra durante la vigilia en Manchester.
Lammy dijo a la multitud que “estamos con ustedes contra el terrorismo”, y pidió a los organizadores de las manifestaciones propalestinas planeadas para el fin de semana “que se detengan y retrocedan”.
La policía de Londres instó a los organizadores a cancelar una movilización prevista para el sábado contra el veto al grupo Palestine Action, que ha sido calificado como organización terrorista por el gobierno.
Los organizadores afirmaron que no suspenderán la convocatoria, donde se espera que cientos de personas sostengan carteles apoyando al grupo prohibido.
“Cancelar protestas pacíficas es permitir que el terrorismo gane”, dijo el grupo en un comunicado. AP