«Viento en popa» está la organización del próximo certámen electoral, según la JCE
Santo Domingo, 12 julio . Satisfacen las declaraciones ofrecidas durante el fin de semana por Román Jáquez Liranzo, presidente la Junta Central Electoral (JCE), que asegura que “todo va viento en popa”, esas fueron exactamente sus palabras, respecto a la organización de las elecciones del año 2024.
Resaltó el buen ritmo de trabajo y el comportamiento exhibido por los partidos, movimientos y agrupaciones políticas en el inicio de la precampaña para las primarias de octubre, y que hasta el momento han sido respetados los plazos establecidos.
Para mayor satisfacción, los pronunciamientos del presidente de la JCE se produjeron en el marco de cinco graduaciones simultáneas de 1,364 personas que integran las 158 Juntas Electorales de todo el país, las que participaron en un Diplomado Especializado en Administración Electoral.
Esta capacitación garantiza un buen desempeño en la administración de las próximas elecciones, y es también una suerte de “graduación” de la Escuela Nacional de Formación Electoral y del Estado Civil, convertida en un Instituto Especializado Superior, que impartirá licenciaturas en administración electoral y registro civil e identidad.
En esa misma dirección, en cuanto a contar con un personal debidamente entrenado en todo lo concerniente a la administración de las próximas elecciones, hay que recordar que recientemente, mediante un concurso público, la JCE seleccionó a más de 400 instructores que tendrán a su cargo la capacitación de las personas que trabajarán en los Colegios Electorales de los diferentes municipios del territorio nacional.
Es un hecho relevante, con el que el órgano encargado de administrar los comicios ha hecho historia, no solo por el sistema que utilizó para la contratación, sino porque esa capacitación contribuirá a que primen valores cívicos y democráticos, como también el apego a lo que dictan las leyes.
Enhorabuena estas acciones que refuerzan la capacidad y credibilidad de la JCE, con la esperanza de que para los torneos que se avecinan los partidos, movimientos y agrupaciones políticas y sus candidatos, colaboren con el respeto a las reglas de juego y no reediten la mala práctica de distraerla, especialmente en momentos en que está centrada, y empeñada, en cumplir a cabalidad su tarea.