Vivek Ramaswamy ocupa un lugar central, además de otros momentos clave del primer debate republicano

POR STEVE PEOPLES Y NICHOLAS RICCARDI

Ocho candidatos presidenciales republicanos se reunieron en el escenario del debate por primera vez el miércoles por la noche. El expresidente Donald Trump, por supuesto, no participó. Dada su gran ventaja en las encuestas, insistió en que su presencia sólo ayudaría a sus rivales menores. En cambio, Trump se sentó para una entrevista con el ex presentador de Fox News, Tucker Carlson, que se transmitió en línea.

Al no asistir, Trump buscó socavar la importancia del debate. Pero su ausencia también ofreció a sus oponentes la oportunidad de estallar ante millones de votantes observando. El gobernador de Florida, Ron DeSantis, el principal rival de Trump, era quizás el que tenía más que ganar… o perder. Pero varios otros también estaban en posición de aprovechar un fuerte debate que se estaba manifestando en el escenario nacional.

Aquí están nuestras primeras conclusiones de una noche llena de acción:

VIVEK TOMA EL CENTRO DE ATENCIÓN

En el centro del escenario, y en el centro de los intercambios más candentes del debate, estaba un hombre de 38 años que nadie esperaba que estuviera allí ni siquiera hace unos meses: un candidato novato y empresario tecnológico llamado Vivek Ramaswamy.

Aunque está muy por detrás de Trump, Ramaswamy ha ido avanzando en las encuestas recientes, lo que le ha llevado a ocupar una posición central junto al gobernador de Florida, Ron DeSantis. Y rápidamente demostró por qué cuando mostró su enfoque listo para video y mensaje, hablando de cómo sus padres pobres se mudaron a los EE. UU. y él tenía la capacidad de fundar empresas de miles de millones de dólares.

Entonces Ramaswamy intentó demostrar que no era un político normal y empezó a dar codazos. En un momento dado declaró: “Soy la única persona en el escenario a la que no se le compra ni se le paga”. Criticó a sus rivales calificándolos de “súper títeres del PAC” que utilizaban “lemas ya preparados y preparados” para atacarlo.

Parecía apostar a que los votantes de las primarias preferían decir algo memorable a algo hecho. Sus rivales no estaban de acuerdo.

«Ahora no es el momento de recibir capacitación en el trabajo», dijo el ex vicepresidente Mike Pence. «No necesitamos traer a un novato».

El exgobernador de Nueva Jersey, Chris Christie, intervino durante uno de los ataques más mordaces de Ramaswamy. «Ya estoy harto de un tipo que se para aquí y suena como ChatGPT», dijo Christie, añadiendo que la frase inicial de Ramaswamy sobre ser un tipo delgado con un nombre difícil de pronunciar le recordaba al ex presidente Barack Obama, no a un un elogio en un escenario republicano.

La exgobernadora de Carolina del Sur, Nikki Haley, atacó el argumento de Ramaswamy de que Estados Unidos no debería apoyar a Ucrania en su defensa contra la invasión rusa. “Bajo su supervisión, Estados Unidos sería menos seguro. No tienes experiencia en política exterior y se nota”, le dijo Haley, parándose directamente a su izquierda.

MANEJAR A TRUMP

La ex embajadora ante la ONU, Nikki Haley, habla durante un debate de las primarias presidenciales republicanas organizado por FOX News Channel el miércoles 23 de agosto de 2023 en Milwaukee. (Foto AP/Morry Gash)

Los candidatos tardaron más de una hora en enfrentarse al elefante que no estaba en la sala.

Y cuando lo hicieron, la mayoría de los participantes levantaron la mano para decir que apoyarían a Trump incluso si fuera condenado en un tribunal de justicia. Esto incluso después de que los moderadores señalaran que Trump enfrenta más de 90 cargos criminales en casos separados en cuatro estados.

Ramaswamy prometió perdonar a Trump si tuviera la oportunidad.

“Digamos la verdad. Creo que el presidente Trump fue el mejor presidente del siglo XXI. Es un hecho”, dijo Ramaswamy.

Christie, ex fiscal federal, respondió agresivamente a pesar de ser ahogada en ocasiones por los abucheos de la audiencia.

Incluso si la gente no está de acuerdo con los cargos penales, dijo Christie, «la conducta está por debajo del cargo del presidente de los Estados Unidos».

Pence también se negó a decir que perdonaría a Trump si finalmente es declarado culpable. Dijo que daría a la posibilidad una “consideración justa”.

DeSantis fue mucho más cauteloso. No abordó las acusaciones de Trump ni su comportamiento cuando se le dio la oportunidad, sino que pidió el fin de la “militarización” del Departamento de Justicia.

Sin decirlo directamente, sugirió que el Partido Republicano debe dejar atrás el bagaje de Trump.

«Republicanos, debemos mirar hacia adelante», dijo DeSantis.

DISENSIÓN SOBRE EL ABORTO POST-DOBBS

Los republicanos en el escenario no restaron importancia a su fuerte oposición al derecho al aborto cuando se les dio la oportunidad. Pero había una clara división entre los candidatos sobre si impulsar una prohibición federal del aborto.

Haley, la única mujer en el escenario, pidió a sus oponentes que fueran honestos con los votantes y que una ley federal que impone una prohibición del aborto en todos los estados probablemente nunca sería aprobada en un Congreso estrechamente dividido. Dijo que el tema debería devolverse a los estados. También hizo un llamamiento personal.

«Necesitamos dejar de demonizar este tema», dijo Haley. «No vamos a encarcelar a una mujer… si se hace un aborto».

Del otro lado: Pence, un cristiano evangélico que ha luchado durante mucho tiempo contra el derecho al aborto. Tanto Pence como Scott respaldaron abiertamente una prohibición nacional de los abortos al menos a las 15 semanas.

Pence dijo que el llamado de Haley a encontrar consenso sobre el tema en los estados “es lo opuesto al liderazgo”.

“No es una cuestión exclusiva de los estados. Es una cuestión moral”, afirmó.

En cuanto a DeSantis, quien promulgó la ley de Florida sobre el aborto de seis semanas apenas esta primavera, no adoptó una posición sobre una prohibición federal cuando se le preguntó directamente.

Dijo que estaba “orgulloso” de firmar la prohibición del aborto en su estado, que es una de las más estrictas del país.

Es probable que los demócratas estuvieran contentos con la discusión. Ya planean hacer del aborto un tema central en las elecciones generales del próximo otoño.

AP

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