2022-Guerra Rusia/Ucrania 2023 ¿Uso armas nucleares?
Ellis Pérez
Este 2022, que hoy termina, pasará a la historia como el año de la invasión de Rusia a Ucrania. Al principio el presidente ruso Vladimir Putin, lo señaló como un hecho de poca importancia, que solo buscaba la “desmilitarización y desnazificación de Ucrania”.
El liderazgo sorprendente que ha mostrado el presidente ucraniano Volodimir Zelensky más el coraje patrio de apasionada entrega en defensa de su territorio de las fuerzas armadas ucranianas no han dejado de sorprender a un mundo que tenía la imagen de una Rusia conocida como una de las principales potencias del mundo, enfrentada a un país que nunca ha mostrado grados significativos de ser una potencia comparable.
En el terreno de batalla, aunque parezca mentira, a Rusia se le ve como el lado perdidoso de la guerra hasta ahora. Lógicamente, el apoyo de Occidente, con los USA a la cabeza, ha marcado la diferencia en cuanto a la cantidad de armas y municiones que Ucrania ha utilizado hasta ahora. Putin se ha quejado, repetidas veces, de que no solo está luchando contra Ucrania, sino también, con el conjunto de aliados de Occidente que se apiñan detrás de Ucrania. Ha dicho y repetido que si ve en peligro la estabilidad de la patria rusa no dudaría en utilizar las armas nucleares tácticas que fueran requeridas. Esta misma semana su ministro de Relaciones Exteriores, Sergei Lavrov, ha indicado que Rusia está dispuesta a negociar la paz siempre y cuando Ucrania respete las condiciones rusas, que de lo contrario las Fuerzas Armadas rusas darán la repuesta final, utilizando todo su poderío. Esto implicaría el uso de armas hasta ahora no utilizadas.
Si a este cuadro le sumamos la masiva incursión de China al estrecho de Taiwán con grandes cantidades de aviones y barcos de guerra y el señalamiento de la presidente de Taiwán de que estaba dando instrucciones para prepararse para la guerra, el cuadro es perturbador. Como si todo esto fuera poco, Corea del Norte, ha estado agresivamente lanzando misiles y drones que Corea del Sur reclama están penetrando en su espacio aéreo.
Luce que el 2023, podría ser un año en el que una decisión apresurada o algo alocada culmine con el uso de un arma nuclear de las llamadas tácticas, que aunque producen efectos devastadores no implica la cobertura de muy grandes espacios. ¿Qué hacer, cruzar los dedos o rogar a Dios?