Récord del oro refleja la tensión económica Global: La guerra comercial de EE.UU. sacude los mercados
Por Manuel Jiménez
Santo Domingo, 22 de abril de 2025. El oro volvió a brillar con fuerza en los mercados internacionales, al alcanzar un nuevo récord histórico. La onza troy del metal precioso se cotizó en US$3,430, consolidando su papel como refugio financiero frente a la incertidumbre económica global.
Este aumento en el precio, publicado en los índices de commodities de Bloomberg, representa una subida del 0.15% al inicio de la semana, mientras que otros productos como el cacao también mostraron alzas significativas, con un incremento de 4.89%, cotizándose en US$8,701 por tonelada métrica.
Este nuevo máximo del oro no es un fenómeno aislado. Se enmarca en un contexto internacional marcado por tensiones geopolíticas y económicas, especialmente por la creciente guerra comercial liderada por Estados Unidos bajo la administración del presidente Donald Trump.
Las políticas arancelarias impulsadas por Washington han sembrado dudas sobre la estabilidad del comercio global y, como resultado, los inversionistas han recurrido al oro como un activo de resguardo, aumentando su demanda y por ende, su valor.
El oro: termómetro de la incertidumbre económica
Durante décadas, el oro ha sido considerado una inversión segura en tiempos de crisis, y en esta ocasión no ha sido diferente. Los mercados financieros están reaccionando con cautela ante el deterioro de las relaciones comerciales entre Estados Unidos y sus principales socios económicos, en particular China y la Unión Europea.
Los analistas coinciden en que el repunte del oro es reflejo directo de la pérdida de confianza en la estabilidad de las políticas económicas norteamericanas. Las crecientes dudas sobre el rumbo de la economía mundial, sumadas a los conflictos internos en Estados Unidos, han fortalecido la percepción de riesgo entre los inversores, quienes prefieren proteger su capital en valores tradicionalmente seguros.
Tensión entre Trump y la Reserva Federal
Un factor determinante en este escenario ha sido la confrontación abierta entre el presidente Donald Trump y el titular de la Reserva Federal (Fed), Jerome Powell. La disputa ha pasado de lo institucional a lo personal, y ya ha tenido repercusiones directas en los mercados financieros.
Trump ha criticado abiertamente a Powell por no reducir las tasas de interés, a pesar del aumento en las presiones inflacionarias generadas por su política arancelaria. En un mensaje reciente, el mandatario estadounidense calificó al presidente del banco central como un “gran perdedor” por no actuar conforme a sus expectativas, insinuando nuevamente su deseo de destituirlo.
Este choque entre el Ejecutivo y el organismo encargado de la política monetaria ha encendido las alarmas en la comunidad financiera internacional. La aparente injerencia del presidente sobre las decisiones de la Fed pone en duda la independencia de una de las instituciones más importantes del sistema económico de EE.UU., generando aún más volatilidad en los mercados.
¿Puede Trump despedir a Powell?
La pregunta que muchos se hacen es si legalmente el presidente Trump tiene la facultad de remover al presidente de la Fed. Según los reportes difundidos por diversas agencias de noticias, esta posibilidad está siendo evaluada por el equipo económico de la Casa Blanca.
Kevin Hassett, asesor económico de Trump, admitió el pasado viernes que el tema está en discusión, lo que reavivó el debate sobre la autonomía del banco central.
El propio Trump, en declaraciones ofrecidas días atrás, afirmó que “el despido de Powell no puede llegar lo suficientemente rápido”, reflejando su frustración ante las decisiones de política monetaria que, según él, no acompañan su estrategia económica.
Este tipo de declaraciones han añadido más incertidumbre al mercado y empujado a los inversores a buscar refugio en el oro, lo cual ha contribuido significativamente al alza de su valor.
Impacto global de la guerra comercial
La guerra de aranceles emprendida por el gobierno de Trump no solo ha afectado las relaciones comerciales con China y otros países, sino que también ha creado un clima de desconfianza generalizado en la economía global. Las medidas proteccionistas han encarecido los productos importados, afectado las cadenas de suministro y reducido la rentabilidad de muchas empresas multinacionales.
El Fondo Monetario Internacional (FMI) y otros organismos multilaterales han advertido que estas tensiones podrían frenar el crecimiento económico mundial. El Producto Interno Bruto (PIB) global podría verse afectado si persisten las barreras comerciales, generando consecuencias negativas para países en desarrollo altamente dependientes del comercio exterior.
Reacciones de los mercados financieros
El debilitamiento del dólar ha sido otra consecuencia directa del entorno actual. La divisa estadounidense ha perdido valor frente a otras monedas, lo que paradójicamente también ha impulsado el valor del oro, ya que al abaratarse el dólar, el metal se vuelve más accesible para los compradores internacionales.
A su vez, el aumento en el precio de otros commodities como el cacao responde a factores combinados, entre ellos el temor a disrupciones en la cadena de suministro y la creciente demanda en mercados clave. Esto ha llevado a los analistas a prever que la tendencia alcista en el precio de ciertos productos básicos podría mantenerse si la incertidumbre continúa.
Perspectivas a futuro
A corto y mediano plazo, los mercados seguirán observando con atención las decisiones de la Fed y los movimientos del gobierno estadounidense. El precio del oro, que ya acumula varios récords históricos en las últimas semanas, podría seguir subiendo si persiste la desconfianza hacia las políticas económicas y la escalada del conflicto comercial.
Expertos en análisis de inversiones recomiendan cautela, señalando que aunque el oro es una opción segura en tiempos de crisis, su volatilidad también puede ser alta en contextos de cambio repentino. Las decisiones que se tomen en los próximos días desde Washington podrían marcar el rumbo del mercado y definir si el metal precioso sigue batiendo récords o si comienza una etapa de estabilización.
Mientras tanto, el mundo observa expectante, consciente de que lo que sucede en el corazón financiero de Estados Unidos tiene implicaciones que rebasan sus fronteras. La historia se repite: en tiempos de incertidumbre, el oro vuelve a ser rey.