Remesas evitan que más de 176 mil dominicanos caigan en la pobreza, revela informe del BID

SANTO DOMINGO, 12 de diciembre. – Las remesas enviadas por dominicanos en el exterior continúan siendo un pilar fundamental para la estabilidad económica de cientos de miles de hogares en el país.

De no ser por estos ingresos, al menos 176,964 personas caerían en condiciones de pobreza relativa o extrema, según un informe publicado por el Banco Interamericano de Desarrollo (BID). El estudio revela que 163,105 dominicanos estarían en pobreza relativa y otros 13,859 en pobreza extrema si no contaran con este sustento económico.

Basado en datos del año 2024, el informe explica que el 12.3 % de la población dominicana vive en pobreza relativa, y que sin el impacto de las remesas este indicador subiría a 13.6 %.

Asimismo, la pobreza extrema pasaría del actual 1.0 % a un preocupante 1.5 %. El estudio, titulado “Las remesas en América Latina y el Caribe 2025”, subraya cómo estos flujos de dinero han funcionado como una red de contención para cientos de miles de dominicanos, al evitar su deslizamiento hacia situaciones más precarias.

Hasta octubre de 2025, el Banco Central de la República Dominicana (BCRD) reportó ingresos por remesas equivalentes a 9,878.4 millones de dólares, con una proyección del BID de que esta cifra alcanzará los 11,973 millones al cierre del año, lo que representaría el 9.2 % del PIB nacional.

Aunque el 94.5 % de estas remesas son recibidas por hogares que no están en situación de pobreza, el BID advierte que muchos de ellos podrían volverse vulnerables si dejaran de percibir estos fondos.

El informe también cuestiona por qué estos ingresos no alcanzan a los hogares en situación más crítica, destacando que la migración requiere una inversión inicial que muchos hogares pobres no pueden costear, lo que los excluye del circuito de remesas.

En el análisis regional, la República Dominicana se posiciona como el quinto país que más remesas recibe en América Latina y el Caribe, por detrás de México (61,810 millones de dólares), Guatemala (25,857 millones), Colombia (13,379 millones) y Honduras (11,983 millones).

Para 2025, el BID proyecta que las remesas totales en la región alcanzarían los 174,426 millones de dólares, con un crecimiento del 8 % respecto al año anterior, destacando nuevamente la importancia de estos flujos monetarios no solo para las economías nacionales, sino también para la contención de la pobreza en miles de hogares latinoamericanos.

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