Acusado niega conocer a Perla, pero madre insiste: “No fue un atraco, fue acoso”

Santo Domingo, 30 Diciemnbre. – El caso de la muerte de la joven Perla Yoskasta Santos Pacheco ha tomado un giro marcado por fuertes contradicciones entre la versión del oficial acusado y los señalamientos de la familia de la víctima.

El mayor del Ejército, Diego Geraldo Mesa Arismendi, imputado por la muerte de la joven en un hecho ocurrido en el sector Los Guandules del Distrito Nacional, negó categóricamente cualquier relación o conocimiento previo de Perla.

“No conozco a esa señora, no conozco a esa joven”, afirmó Mesa Arismendi mientras era trasladado bajo estricta seguridad hacia la cárcel preventiva del Palacio de Justicia de Ciudad Nueva, a la espera de la audiencia de medida de coerción, fijada para el próximo viernes 2 de enero de 2026.

Para desvincularse de las acusaciones de acoso vertidas por la familia, el mayor aseguró que su único contacto con el entorno de la joven era a través de un vecino. “Inclusive, soy amigo del vecino de los padres y siempre los saludaba”, indicó, sugiriendo que su presencia en la zona era circunstancial.

Sin embargo, estas declaraciones chocan frontalmente con la versión de la madre de la víctima, Line Pacheco, quien ha desmentido enérgicamente que su hija muriera en un intento de atraco. Según su testimonio, el verdadero motivo detrás del hecho fue el constante acoso al que Perla habría sido sometida por parte del imputado.

“Mi hija no fue víctima de un robo. Fue víctima de acoso”, declaró la madre, visiblemente afectada, pero firme. Aseguró que tras el velorio de Perla, una amiga cercana reveló que la joven se sentía intimidada por Mesa Arismendi, aunque nunca se atrevió a contarlo por temor.

Pacheco narró un episodio clave que, según ella, demuestra el asedio del mayor: el pasado 13 de noviembre, durante la celebración del cumpleaños de Perla, el oficial se presentó en el lugar acompañado de su pareja, y su actitud obligó a la joven a retirarse de su propia fiesta.

“Ese hombre la miraba de forma inadecuada. Eso es acoso, y yo, como maestra y psicóloga, sé reconocerlo. Mi hija se fue a acostar temprano, asustada”, afirmó.

Además, la madre defendió a los jóvenes que acompañaban a Perla el día del incidente, incluyendo a un primo de la víctima, rechazando cualquier vínculo con bandas delictivas. “Si fueran de una banda, no estuvieran aquí dando la cara. No emitan juicios sin saber”, pidió.

En un llamado directo a las autoridades, Line Pacheco solicitó que se entreviste a los testigos y amigas de su hija, quienes podrían confirmar la existencia de un patrón de acoso previo. “Soy cristiana y no debo mentir. Pongo a un Dios vivo de testigo: a mi hija no la iban a atracar, la estaban asediando”, aseguró.

Mientras tanto, la jueza Fátima Veloz del Juzgado de Atención Permanente del Distrito Nacional decidió aplazar la audiencia de medida de coerción, otorgando tiempo al abogado del acusado para preparar su defensa.

El caso permanece bajo investigación, mientras la familia Santos Pacheco espera que las pruebas testimoniales y los videos de cámaras de seguridad revelen la verdad detrás de la trágica muerte de Perla Yoskasta.

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