Campoamor, el PRM y una bomba Molotov
Pablo McKinney
Es la liturgia verbal que se repite.
Los relatos reiterados y sus marcos discursivos.
Ya no solamente somos el Museo Continental del Absurdo, que les contaba el otro día, sino también el gran Louvre de “la guitarra y el violín”, “del cristal con que se mira”, de “la copa medio vacía o medio llena”.
El discurso del presidente Abinader vino a revelarnos la Ley Campoamor que durante siglos ha servido para mostrar el subjetivismo, el relativismo y la amnesia conveniente de nuestros políticos a la hora de analizar un hecho social: los contenidos de un discurso, por ejemplo.
Los versos que inspiran la Ley de Campoamor son estos: “En este mundo traidor / nada hay verdad ni mentira: todo es según el color / del cristal con que se mira».
Hoy, fuera del gobierno los dos PLD en verde o en morado, gracias al Dios Google es muy fácil confirmar la manera en que, sin ningún disimulo, malestar ni apuro, nuestros jefes políticos se quejan de las muchas promesas de un discurso, del optimismo presidencial, o de una posible modificación constitucional que cuando eran ellos quienes tocaban el violín palaciego, y el cristal de sus gafas eran color gobierno, sin inmutarse, ellos propiciaron, practicaron. ¡Hagan memoria!
Dicho esto; fuera la liturgia comunicacional, y apartadas momentáneamente las mezquindades políticas, reconozcamos que la administración Abinader ha sido exitosa en el manejo de la pandemia, en el salvamento de un año escolar casi perdido, en la recuperación relativa de las ZF, el turismo o los empleos.
Lamentablemente, una bomba Molotov, (nunca mejor dicho lo de Molotov) de contenidos locales y globales le acecha.
El peligro de esa bomba ha aumentado por la crisis de celos por la que atraviesa la alianza del PRM con el PLD verdefernández, que por estos días anda sublevado a nivel de redes, y a través de un mediatours televisivo, que para algo se dirigió/ codirigió el país durante 20 años.
El cóctel Molotov que acecha al gobierno del PRM tiene varios ingredientes, cada uno peor que el otro: inflación, desmonte parcial del subsidio eléctrico, aumento de los precios internacionales del petróleo, crisis del turismo ruso hacia RD, aumento en el precio del pollo, y si algo faltaba, la guerra de palitos chinos en el PRM, entre dirigentes popis VS. dirigentes wawawá…. pero ese es tema para otro bulevar. Con su permiso.