Denuncian cobros ilegales a inmigrantes haitianos por oficiales de migración en República Dominicana
Santo Domingo, 26 agosto – La República Dominicana experimenta un constante flujo de haitianos que buscan una mejor calidad de vida, huyendo de las dificultades sociales y económicas que enfrentan en sus países de origen.
En este contexto, los haitianos se destacan entre los inmigrantes que ingresan al país, frecuentemente de manera ilegal a través de la frontera terrestre. Sin embargo, este fenómeno trae consigo problemas, siendo uno de los más notorios el lucrativo negocio que se ha desarrollado alrededor de la detención de indocumentados durante operativos contra indocumentados.
Un haitiano, cuya identidad se mantendrá en anonimato por razones de seguridad, ha denunciado públicamente las irregularidades que ocurren en este proceso.
Este denunciante relata que existe un patrón alarmante: las autoridades exigen pagos que oscilan entre 2,000 y 3,000 pesos para liberar a haitianos indocumentados detenidos en redadas de la policía o de Dirección General de Migración (DGM). El denunciante, quien reside en el país desde 2009, fue uno de los afectados por esta práctica.
«Me apresaron y me llevaron al destacamento de la avenida Cayetano Germosén», declaró el denunciante. En ese lugar, estuvo detenido junto a otros haitianos, y mientras él permaneció detenido, dos de ellos fueron liberados tras pagar sumas considerables: uno pagó 2,000 pesos y el otro 3,000 pesos debido a que tenía un motor retenido.
Posteriormente, fue trasladado al Centro Vacacional de Haina, donde la situación empeoró. Allí, según su testimonio, los guardias del centro exigían entre 12,000 y 16,000 pesos para liberar a los inmigrantes indocumentados. Además, mencionó que los guardias presionan a los detenidos para que pidan dinero a sus familiares con el fin de ser liberados.
Este sistema de cobros ilegales afecta incluso a las familias de los detenidos, ya que los guardias solicitan 200 pesos para proporcionarles comida. El denunciante también alerta sobre la mezcla de personas con estatus migratorio regular con los indocumentados, lo cual podría llevar a deportaciones injustas.
Agrega que las condiciones de detención son difíciles y el trato a menudo carece de sensibilidad hacia los detenidos.
Finalmente, el denunciante logró obtener su libertad después de tres días de detención.
