Discrepancias de precios en República Dominicana: Impacto en los consumidores y medidas gubernamentales

Santo Domingo, 15 de marzo En República Dominicana, la disparidad de precios en los productos de consumo masivo entre distintos establecimientos comerciales como colmados, mercados y supermercados es una realidad palpable. Esta disparidad, que se refleja en precios variables para productos de calidad y tamaño similares, evidencia una inestabilidad en los precios de artículos esenciales para la población.

Por ejemplo, la libra de arroz selecto puede costar entre 40, 55 y 60 pesos en un colmado, mientras que en un supermercado su precio oscila entre 27 y 33 pesos. Esta diferencia se repite en otros productos como el pollo, el plátano, el ajo, la cebolla y el aceite, según una consulta realizada por EL DÍA en varios colmados del Distrito Nacional y el Cibao.

Para Antonio Cruz Rojas, presidente del Consejo Nacional de Comerciantes y Empresarios de la República Dominicana (Conacerd), estas discrepancias de precios se deben a que, en muchos casos, los supermercados compran directamente a los proveedores y productores, lo que les permite ofrecer precios más competitivos. Además, los supermercados funcionan como detallistas, lo que les permite manejar márgenes de ganancia más amplios.

Cruz Rojas también señala que factores como la ubicación del negocio, la capacidad de compra del establecimiento, los costos operativos y el conocimiento del negocio influyen en la diferencia de precios entre distintos establecimientos. Por ejemplo, los colmados ubicados en zonas urbanas suelen tener costos operativos más altos que los ubicados en zonas rurales.

Esta disparidad de precios afecta especialmente a las familias de menores recursos económicos, cuyos ingresos mensuales no superan los 15,906 pesos. Según el Boletín de Pobreza Monetaria, el 47.3% de los dominicanos vive en situación de pobreza monetaria, siendo las zonas rurales las más afectadas.

El informe también destaca la brecha de género en la pobreza, con 137.7 mujeres por cada 100 hombres en situación de pobreza, lo que indica un aumento en la desigualdad de género en el país.

Para abordar esta problemática, el gobierno dominicano ha desarrollado el programa «A Comer: Del Campo al Colmado», en colaboración con varias cooperativas. Este programa busca abaratar los precios de 16 productos agropecuarios y está dirigido a impactar directamente a las familias de menores ingresos. Iniciado como un plan piloto en Los Alcarrizos y Pedro Brand, el programa tiene como objetivo expandirse a nivel nacional, ofreciendo productos a precios hasta un 20% más bajos que los colmados tradicionales.

Fernando Durán, del Banco Agrícola, destaca la acogida positiva que ha tenido el programa, resaltando su impacto en la economía doméstica de las familias más vulnerables. El programa se está extendiendo a otras zonas de la capital con el propósito de beneficiar a un mayor número de personas y convertirse en una iniciativa de alcance nacional.

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