El dron enemigo que mató a tropas estadounidenses en Jordania fue confundido con un dron estadounidense, sugiere un informe preliminar

WASHINGTON, 29 enero— Es posible que las fuerzas estadounidenses hayan confundido un dron enemigo con uno estadounidense y lo hayan dejado pasar sin oposición a una base en el desierto de Jordania, donde mató a tres soldados estadounidenses e hirió a docenas más, dijeron funcionarios el lunes.

Los detalles del ataque del domingo surgieron cuando el presidente Joe Biden se enfrentaba a un difícil acto de equilibrio, culpando a Irán y buscando contraatacar de forma contundente sin provocar una mayor escalada del conflicto de Gaza.

Mientras el dron enemigo volaba a baja altura, un dron estadounidense regresaba a la pequeña instalación conocida como Torre 22, según un informe preliminar citado por dos funcionarios, que no estaban autorizados a hacer comentarios e insistieron en el anonimato.

Como resultado, no hubo ningún esfuerzo por derribar el dron enemigo que golpeó el puesto de avanzada. Uno de los remolques donde duermen las tropas sufrió la peor parte del ataque, mientras que los remolques circundantes sufrieron daños limitados por la explosión y los escombros voladores. Si bien no hay grandes sistemas de defensa aérea en la Torre 22, la base sí cuenta con sistemas contra drones, como los interceptores de drones Coyote.

Aparte de los soldados muertos, el Pentágono dijo que más de 40 soldados resultaron heridos en el ataque, la mayoría con cortes, contusiones, lesiones cerebrales y heridas similares. Ocho fueron evacuados por motivos médicos, incluidos tres que se dirigían al Centro Médico Regional Landstuhl en Alemania. Se esperaba que los otros cinco, que sufrieron “lesiones cerebrales traumáticas menores”, regresaran a sus funciones.

Los rebeldes hutíes de Yemen dicen que atacaron un buque de guerra estadounidense sin pruebas. Un funcionario estadounidense rechaza la afirmación.

Cuando se le preguntó si el fracaso en derribar el dron enemigo fue un “error humano”, la portavoz del Pentágono, Sabrina Singh, respondió que el Comando Central de Estados Unidos todavía estaba evaluando el asunto.

El Pentágono identificó a los muertos en el ataque como el sargento. William Jerome Rivers, 46 años, de Carrollton, Georgia; Especialista Kennedy Ladon Sanders, de 24 años, de Waycross, Georgia; y Spc. Breonna Alexsondria Moffett, 23 años, de Savannah, Georgia.

Los tres soldados de la Reserva del Ejército de EE. UU. fueron asignados a la 718.ª Compañía de Ingenieros, el 926.º Batallón de Ingenieros y la 926.ª Brigada de Ingenieros en Fort Moore, Georgia.

La explicación de cómo el dron enemigo evadió las defensas aéreas estadounidenses se produjo cuando la Casa Blanca dijo el lunes que no busca una guerra con Irán, incluso cuando Biden promete tomar represalias. La administración demócrata cree que Teherán estuvo detrás del ataque.

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Sagar Meghani, corresponsal de AP en Washington, informa.

Biden se reunió con asesores de seguridad nacional en la Sala de Situación de la Casa Blanca para discutir los últimos acontecimientos y posibles represalias.

«Aquí no hay una respuesta fácil», dijo el portavoz del Consejo de Seguridad Nacional, John Kirby. «Y es por eso que el presidente se reúne con su equipo de seguridad nacional para sopesar las opciones que tiene ante sí».

El descarado ataque, que la administración Biden atribuye a representantes con sede en Irán, añade otra capa de complejidad a una situación ya tensa en Medio Oriente mientras la administración Biden intenta evitar que la guerra entre Israel y Hamas se expanda hasta convertirse en un conflicto regional más amplio.

«El presidente y yo no toleraremos ataques a las fuerzas estadounidenses y tomaremos todas las medidas necesarias para defender a Estados Unidos y a nuestras tropas», dijo el secretario de Defensa, Lloyd Austin, durante su reunión en el Pentágono con el secretario general de la OTAN, Jens Stoltenberg.

El ataque con drones fue uno de docenas contra tropas estadounidenses en Medio Oriente desde que Hamás lanzó ataques contra Israel el 7 de octubre, iniciando la guerra en Gaza. Pero es la primera vez que mueren miembros del servicio estadounidense.

Biden prometió el domingo “hacer que todos los responsables rindan cuentas en el momento y de la manera que elijamos”, pero dijo que Estados Unidos no buscaba meterse en otro conflicto en Medio Oriente.

Kirby también dejó en claro que la paciencia estadounidense se ha agotado después de más de dos meses de ataques de representantes iraníes contra tropas estadounidenses en Irak, Siria y Jordania y contra la Armada y buques comerciales de Estados Unidos en el Mar Rojo. Los grupos aliados, incluidos los rebeldes hutíes de Yemen y Kataeb Hezbollah, con base en Irak, dicen que los ataques son una respuesta a las operaciones militares en curso de Israel en Gaza.

«No buscamos una guerra con Irán», dijo Kirby a los periodistas. “Dicho esto, este fue un ataque muy grave. Tuvo consecuencias letales. Responderemos y responderemos apropiadamente”.

Irán negó el lunes estar detrás del ataque a Jordania.

«Estas afirmaciones se hacen con objetivos políticos específicos para revertir las realidades de la región», dijo la agencia de noticias estatal iraní IRNA citando al portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores, Nasser Kanaani. Irán niega regularmente su participación en ataques relacionados con él a través de las milicias que arma en todo el Medio Oriente.

Kirby dijo que los funcionarios estadounidenses todavía están trabajando para determinar qué grupo militante estuvo detrás del ataque. Señaló que Irán lleva mucho tiempo equipando y entrenando a las milicias.

Los republicanos han culpado a Biden por hacer muy poco para disuadir a las milicias iraníes, que han llevado a cabo aproximadamente 165 ataques contra tropas estadounidenses en la región desde el inicio de la guerra.