Felipe González destaca el agotamiento de la comunidad internacional frente a la crisis haitiana

Santo Domingo, 24 noviembre – El ex presidente del Gobierno de España, Felipe González, arrojó luz sobre la prolongada crisis en Haití, manifestando su opinión acerca de las múltiples intervenciones de la comunidad internacional en la nación caribeña y su impacto limitado en la resolución de la crisis.

González destacó que, a pesar de los esfuerzos de la comunidad internacional, no se han logrado los efectos positivos deseados en la situación haitiana, lo que ha llevado a una especie de desinterés por parte de la colectividad mundial. El líder político expresó que «se aburrieron» de intentar abordar el problema, observando cómo diversas tropas, provenientes de distintos países, han desfilado por Haití sin conseguir revertir su crítica situación, describiendo al país como un Estado fallido que ha ido empeorando con el tiempo.

En su intervención durante un desayuno con ejecutivos del Listín Diario, González resaltó la complejidad de la realidad haitiana y cómo esta afecta directamente a la República Dominicana, país vecino que comparte la isla con Haití. González señaló que Haití enfrenta serios problemas de gobernanza, incluyendo el control por parte de bandas criminales, deficiencias en el sistema de salud y problemas de inseguridad alimentaria, desafíos que, en su opinión, superan las posibilidades de solución de la República Dominicana.

El líder histórico del Partido Socialista Obrero Español (PSOE) hizo hincapié en que la labor de la República Dominicana en la resolución de las vicisitudes haitianas es prácticamente nula, y considera que no debería tener un rol relevante en la superación de las dificultades del país vecino, señalando que incluso todas las intervenciones de la comunidad internacional han sido descartadas en Haití, algunas por errores de la intervención y otras debido a las dificultades de intervenir en un estado fallido plagado de bandas criminales.

González enfatizó que, si bien es importante exigir la mejor voluntad por parte de la República Dominicana hacia Haití, el conflicto es principalmente un problema internacional que ha persistido durante mucho tiempo sin resolverse. Subrayó la necesidad de preservar la convivencia pacífica dentro de la República Dominicana, a pesar de los intereses contrapuestos que puedan surgir por la situación en Haití.

El ex mandatario también abordó la posibilidad de unificar ambos países en la isla La Española, argumentando que la historia de independencia de Haití y su relación con la corona española han dejado un legado que dificultaría la fusión de ambas naciones. Enfatizó que si bien teóricamente se podría especular sobre la fusión, la historia pesa demasiado y no resulta viable desde la perspectiva gubernamental.

Además, González analizó la situación política en América Latina, manifestando preocupación por la pérdida de espacio democrático en la región y la falta de detección de los problemas reales que afectan a la población. Destacó la importancia de abordar la inseguridad y la desigualdad en la redistribución del ingreso para preservar la libertad en la región. Expresó que la cooperación y el acuerdo entre los países latinoamericanos son fundamentales para abordar la creciente criminalidad organizada en el continente.

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