Irán está en llamas con las protestas: Los reporteros del Times lo ayudan a comprender lo que está sucediendo.
Por David Leonhardt
The New York Times
Una protesta en Teherán la semana pasada por la muerte bajo custodia policial de Mahsa Amini.Wana News Agency/Via Reuters
Disidencia feroz
Pocos periodistas independientes trabajan hoy en Irán. Pero videos, correos electrónicos y otra información proveniente del interior del país sugieren que Irán está experimentando las protestas más significativas en más de una década.
Las manifestaciones comenzaron después de que Mahsa Amini, de 22 años, muriera bajo custodia policial el 16 de septiembre, luego de haber sido arrestada por violar la ley de Irán que exige que las mujeres usen pañuelos en la cabeza para ocultar completamente su cabello. Este fin de semana, las protestas se extendieron a al menos 80 ciudades y los manifestantes tomaron brevemente el control de una ciudad en el noroeste de Irán. En respuesta, las fuerzas de seguridad del país han abierto fuego contra la multitud.
En el boletín de hoy, trataré de ayudarlo a comprender lo que está sucediendo.
Cinco puntos principales
1. El gobierno de Irán nuevamente está dirigido por intransigentes.
En las elecciones presidenciales del año pasado, los clérigos que ostentan el poder tras bambalinas en Irán descalificaron a casi todos los candidatos excepto a un de línea dura llamado Ebrahim Raisi. Desde que asumió la presidencia, Raisi se ha propuesto revertir el legado de su predecesor reformista, Hassan Rouhani.
“En múltiples frentes, Raisi ha hecho retroceder ferozmente el péndulo al tipo de políticas xenófobas y retórica sorda que se presenciaron durante los primeros días de la Revolución”, escribió Robin Wright este fin de semana en The New Yorker. Entre los movimientos de Raisi: pedir a la policía que haga cumplir estrictamente la ley del pañuelo en la cabeza, en una reversión de la política de Rouhani.
Raisi también ha tomado una línea más dura hacia los EE. UU. En reuniones relacionadas con la reunión de las Naciones Unidas la semana pasada, por ejemplo, se burló de la idea de que la policía de Irán era demasiado violenta. “Cuántas veces en los Estados Unidos, hombres y mujeres son asesinados todos los días a manos de las fuerzas del orden”, dijo el jueves a los periodistas.
Como describió Wright, «Su voz se elevó tan alto y con tanta frecuencia que con frecuencia era difícil escuchar la traducción al inglés a través de nuestros auriculares».
2. El ascenso de la línea dura ha contribuido a aumentar la desesperación entre los jóvenes iraníes.
“La razón por la que la generación más joven está tomando este tipo de riesgo es porque sienten que no tienen nada que perder, no tienen esperanza para el futuro”, dijo a The Times Ali Vaez, director de Irán para el International Crisis Group. (Mis colegas Vivian Yee y Farnaz Fassihi entraron en más detalles en esta historia reciente). Muchos iraníes entienden que están asumiendo riesgos existenciales al protestar, dada la historia del régimen de responder a protestas pasadas con arrestos masivos.
“Estoy impresionado por la valentía de estos jóvenes iraníes”, dijo mi colega David Sanger, quien ha estado cubriendo Irán durante décadas. “Y por la ferocidad de su deseo de salir del dominio de este gobierno”.
Manifestantes en las calles de Teherán el miércoles. Associated Press
3. La economía juega un papel importante en la insatisfacción.
En 2018, Donald Trump decidió seguir una política de alto riesgo y alta recompensa hacia Irán. Salió de un acuerdo nuclear que Barack Obama había negociado tres años antes, que había levantado muchas sanciones a cambio de que Irán se alejara de la capacidad de construir un arma nuclear. Trump volvió a imponer esas sanciones y agregó otras nuevas, apostando a que hacerlo obligaría a Irán a aceptar un trato más duro y tal vez incluso desestabilizaría al gobierno.
Con el tiempo, las sanciones, combinadas con los problemas económicos preexistentes de Irán, hundieron al país en una crisis económica. “Muchos iraníes están luchando para llegar a fin de mes, gracias a una economía diezmada por la mala gestión, la corrupción y las sanciones”, me dijo Vivian, quien es la jefa de la oficina de The Times en El Cairo. “Algunos incluso están ofreciendo vender sus órganos”.
Ella añadió:
En el pasado, digamos, cuando Rouhani fue elegido por primera vez, en 2013, muchos iraníes se sintieron genuinamente optimistas de que las cosas cambiarían, porque Rouhani prometió que el acuerdo nuclear con los EE. UU. ayudaría a abrir la economía e impulsaría el comercio, además de obtener levantadas las sanciones. Pero el estado de ánimo se ensombreció cuando esos beneficios no se materializaron antes de que el presidente Trump anulara el acuerdo.
Con la elección de Raisi, un intransigente que se ha pronunciado en contra de volver al acuerdo y cuyo gobierno no ha mostrado mucha flexibilidad en las negociaciones con las potencias occidentales durante el último año, los iraníes que esperaban una recuperación sintieron que no había manera las cosas mejorarian.
¿Significa todo esto que la política de Trump está teniendo éxito? Muchos expertos dicen que es demasiado pronto para hacer ese juicio. La política ha aumentado considerablemente el riesgo de que Irán pronto tenga un arma nuclear. Y una semana más o menos de protestas no significa que el régimen de Irán colapsará. Sin embargo, si el régimen colapsa, será justo revisar el legado de Trump en Irán.
4. Biden está adoptando un enfoque más duro hacia Irán que Obama.
En 2009, durante la última gran ola de protestas, Obama hizo relativamente poco para apoyarlas, debido a la preocupación de que el gobierno de Irán pudiera presentar las manifestaciones como obra de agitadores extranjeros.
Esta vez, Biden está siguiendo una política más de confrontación. “Parte de la razón por la que hubo un tipo diferente de enfoque en 2009 fue la creencia de que, de alguna manera, si Estados Unidos se pronunciaba, socavaría a los manifestantes, no los ayudaría”, dijo Jake Sullivan, asesor de seguridad nacional de Biden, quien también se desempeñó en el gobierno de Obama. administración, dijo ayer en “Meet the Press”. “Lo que aprendimos después de eso es que puedes pensar demasiado en estas cosas, que lo más importante que debe hacer Estados Unidos es ser firme, claro y con principios en respuesta a los ciudadanos de cualquier país que exigen sus derechos y dignidad”.
Un ejemplo: para combatir los intentos del gobierno de Irán de cerrar gran parte de Internet y evitar que los manifestantes se comuniquen entre sí, la administración de Biden autorizó a algunas empresas de tecnología a ofrecer servicios dentro de Irán sin riesgo de violar las sanciones de EE. UU. La administración también permitió a SpaceX, una de las compañías de Elon Musk, que ofrece el servicio de comunicación Starlink, enviar equipos satelitales a Irán.
“La tecnología disponible hoy hace que sea más fácil que nunca para los iraníes comunicarse en secreto”, dijo David Sanger. “Es por eso que los iraníes están tratando de derribar todo Internet dentro de Irán. Eso es verdadera desesperación”.
5. A corto plazo, parece probable que prevalezca el gobierno de Irán. Por otra parte, las revoluciones rara vez son predecibles.
David lo expresó de esta manera: “La historia sugeriría que dado que el estado posee todas las armas, es poco probable que esto dure. Pero a veces es un error ser esclavo de eventos pasados. La exitosa anexión rusa de Crimea en 2014 llevó a muchos de nosotros, incluido yo mismo, a sospechar que Ucrania se rompería en unos pocos días en febrero”.
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