JCE bajo presión: Elecciones en la mira por acusaciones de compra de votos y recortes de fondos

Santo Domingo, 14 de marzo – La Junta Central Electoral (JCE) se encuentra en un punto crítico tras las elecciones del 18 de febrero, donde su actuación ha sido objeto de escrutinio y críticas por parte de los partidos de oposición y los observadores electorales. A medida que el país se prepara para las próximas elecciones, la JCE enfrenta una serie de desafíos y demandas que ponen a prueba su capacidad para garantizar un proceso electoral justo y transparente.

Una de las principales preocupaciones de los partidos de oposición es la presunta compra de votos y el uso indebido de recursos públicos durante las campañas electorales. A pesar de las denuncias presentadas ante la JCE, la inacción del órgano electoral para abordar estas acusaciones ha generado malestar y desconfianza entre los partidos políticos y los ciudadanos.

El informe de observación electoral de la Organización de Estados Americanos (OEA) destaca la necesidad de combatir la compra de votos, señalando que esta práctica socava la integridad del proceso electoral y mina la confianza de los votantes en el sistema democrático. La OEA insta a las autoridades electorales y policiales a tomar medidas firmes para erradicar esta práctica y restaurar la confianza en el proceso electoral.

Además de las preocupaciones sobre la compra de votos, los partidos de oposición también han cuestionado la distribución de fondos por parte de la JCE para financiar las elecciones. Alegan que el monto asignado es insuficiente y que el calendario de distribución propuesto por la JCE no cumple con las disposiciones legales establecidas. Esta situación ha generado tensiones entre la JCE y los partidos políticos, exacerbando aún más las divisiones políticas en el país.

La coordinadora general de Participación Ciudadana, Lizzie Sánchez, ha instado a la JCE a tomar medidas para evitar que se repitan las irregularidades observadas durante las elecciones municipales del 18 de febrero. Sánchez enfatizó la necesidad de un entrenamiento más riguroso para la Policía Militar Electoral y pidió a la JCE que garantice que no se permita ninguna actividad de campaña fuera de los recintos de votación durante las elecciones futuras.

Por otro lado, el partido en el gobierno no ha respondido a las acusaciones de la oposición sobre el uso de recursos del Estado para beneficiar al partido en el poder. La falta de respuesta por parte del gobierno y de la JCE ha aumentado las tensiones y la incertidumbre sobre el futuro del proceso electoral.

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