La reelección y las alianzas electorales
Miguel Guerrero
1 de 2
A diez meses de las elecciones municipales y a trece de las presidenciales y congresuales, el ambiente político se nutre de elucubraciones sobre las posibilidades de alianzas. La experiencia que dio lugar a la división en los comicios pasados del Partido de la Liberación Dominicana (PLD) hace imposible que esa alianza ocurra a nivel presidencial, a menos que la acepte sobre la base de la candidatura del tres veces presidente Leonel Fernández.
Vista en perspectiva, esa aparente imposibilidad emerge a distancia como un boleto casi seguro hacia la reelección del presidente Luis Abinader.
Como tantas veces en el pasado, las alianzas en el marco municipal y en menor medida en el del Congreso, las discusiones están y serán dominadas por el instinto de preservar posiciones en ambos poderes, a través de negociaciones en las que primarán los intereses particulares de los partidos y sus dirigentes y no el deseo nacional e institucional del país y hacer que las expectativas de la gente mejoren.
Fernández y su partido, la Fuerza del Pueblo, no apoyarán al candidato del PLD porque sería reconocer que su derrota y la del PLD en los comicios pasados, se debió a su salida del partido que lo hizo tres veces presidente. El PLD difícilmente respalde su nueva candidatura porque implicaría aceptar el argumento de Fernández de que perdieron porque no fue él su candidato. Y porque, además, implicaría el congelamiento del prometedor proceso de reorganización y relevo generacional, de cuyo éxito depende su preservación como partido mayoritario de oposición y, por ende, su existencia misma a largo plazo.
De manera que, en mi particular apreciación del panorama político electoral, en medio del deterioro de la popularidad del gobierno del “cambio”, la posibilidad de una reelección de Abinader descansaría en lograr que Fernández insista en ser candidato, lo cual no me parece nada difícil.
Fuente El Caribe