Los candidatos a figuras del deporte panamericano comienzan su cita en Cali

Cali (Colombia), 24 nov (EFE).- Una auténtica selección de las nuevas figuras del deporte de 41 países pondrá en marcha este 25 de noviembre en la ciudad colombiana de Cali la primera edición de los Juegos Panamericanos Júnior.

Unos 3.500 hombres y mujeres entre los 14 y 22 años competirán en 39 disciplinas de un certamen que tendrá sedes alternas en las vecinas ciudades de Buga, Yumbo, Calima-Darien, Jamundí y Palmira, así como en la caribeña de Barranquilla.

Elegida el 27 de marzo de 2019 para organizar la primera versión de los Juegos Panamericanos Junior, Cali superó a las candidaturas de Monterrey (México) y Santa Ana (El Salvador).

Desde entonces esta metrópoli de 2,5 millones de habitantes debió no solo correr contra el reloj para terminar los escenarios, como soportar cinco meses de incertidumbre por el aplazamiento del certamen a raíz de la pandemia de la covid-19, y después padecer los desmanes generados por las protestas sociales de mayo de este año.

Panam Sports, la organización deportiva panamericana presidida por el chileno Neven Ilic, ha definido el naciente certamen, que terminará el 5 de diciembre, como «un antes y un después» para las nuevas generaciones.

«Estamos muy expectantes, sobre todo porque creo que puede ser un antes y un después en el desarrollo de las nuevas generaciones del deporte de América», dijo Ilic en una entrevista con Efe.

El directivo celebró el entusiasmo de los responsables de los 41 comités olímpicos nacionales, que han respondido con el desplazamiento a Colombia de delegaciones más numerosas de las previstas en principio.

«La concurrencia que estamos teniendo es histórica. Todos los países llevan delegaciones mayores de lo que esperábamos», añadió.

Agregó que otro valioso incentivo deriva de la decisión de reglamentar que los medallistas de oro en Cali y sus subsedes tengan clasificación asegurada en los Juegos Panamericanos que Santiago de Chile organizará en 2023.

El ‘antes y después’ previsto por Ilic como semillero de talentos llamados a relevar a figuras consagradas también espera que marque tenga efecto en un cambio de enfoque de la proporción de recursos oficiales para apoyar a los deportistas en América.

«En general, en nuestros países es difícil encontrar financiamientos para las nuevas generaciones. Los presupuestos son finitos y se gastan en las generaciones adultas que están representando a los países», explicó.

«Son pocos (los países) que tienen una reserva económica para las nuevas generaciones. Con un evento grande los gobiernos tendrán una especial atención», añadió el presidente de Panam Sports.

Precisó que la organización de estos Juegos deben marcar también el comienzo de un uso racional de los recursos, sin inversiones excesivas o faraónicas.

«Son Juegos que se están logrando con un presupuesto súper razonable y que debiera también ser un aliciente para todas las ciudades que vengan después de Cali», manifestó.

Sobre las medidas sanitarias que serán observadas anunció que «todos los acreditados de 18 años o más deben tener sus dos vacunas».

Advirtió que «los no vacunados no pueden ser acreditados. y no hay excepciones de ningún tipo».

Las medidas de prevención y cuidado impedirán a los deportistas alternar con el público. «Deberán mantenerse en sus hoteles, sin salir a la ciudad a cenas, fiestas o supermercados», señaló.

ABANICO DE FIGURAS PARA TENER EN CUENTA

Los Juegos Panamericanos Junior reunirán figuras en ascenso que, pese a su corta edad, ya han tenido experiencias en campeonatos regionales y mundiales, y hasta los recientes Juegos Olímpicos de Tokio.

Ecuador apuesta por Lucía Yépez, de 20 años, luchadora que alcanzó el octavo lugar en Tokio y flamante campeona mundial en Belgrado.

Panamá confía en las brazadas de la nadadora Emily Santos y el halterofilista Ronnier Martínez, sus abanderados.

Entre los dominicanos gana fuerza Alexander Ogando, del equipo de 4×400 mixto que ganó la medalla de plata en Tokio.

Uruguay envió a Colombia, entre otras opciones para llegar al podio, al remero Felipe Klüver, que alcanzó la final olímpica en Tokio.

La gran apuesta de Guatemala es Erick Gordillo, el segundo mejor nadador del país, mientras que la nadadora Celina Márquez y la tiradora con arco Paola Corado figuran en las apuestas de los salvadoreños.

La principal figura de la delegación costarricense, Noelia Vargas, se tituló en los Olímpicos de Tokio como la marchista número 21 del mundo, la quinta en América y la mejor de Centroamérica y el Caribe.

El país anfitrión, que tiene una delegación de 370 deportistas, «da mucha importancia a estos Juegos porque son los de la renovación», declaró a Efe el presidente del Comité Olímpico Colombiano (COC), Ciro Solano Hurtado.

Carlos Andrés Valverde

Comentarios
Difundelo
Permitir Notificaciones OK No gracias