Mueren 21 soldados israelíes en el ataque más mortífero contra el ejército desde que comenzó la ofensiva en Gaza

JERUSALÉN, 23 enero  — Militantes palestinos llevaron a cabo el ataque más mortífero contra las fuerzas israelíes en Gaza desde la incursión de Hamas que desencadenó la guerra, matando a 21 soldados, dijo el ejército el martes, un revés significativo que podría sumarse a los crecientes llamados a un alto el fuego. .

Horas más tarde, el ejército anunció que las fuerzas terrestres habían rodeado la ciudad sureña de Khan Younis, la segunda más grande de Gaza, y se podía ver un espeso humo negro elevándose sobre la ciudad mientras miles de palestinos huían hacia el sur. Los testigos dijeron que tanques y tropas israelíes también se habían trasladado a Muwasi, una zona costera cercana que el ejército había declarado previamente zona segura para los palestinos.

El primer ministro Benjamín Netanyahu lamentó la muerte de los soldados israelíes cuando la explosión de una granada propulsada por cohete desencadenó los explosivos que estaban colocando para volar edificios. Pero prometió seguir adelante hasta lograr una “victoria absoluta”, incluida la derrota de Hamas y la liberación de más de 100 rehenes israelíes que aún están en manos de los militantes.

Los israelíes se preguntan cada vez más si es posible lograr esos objetivos de guerra.

El Ministro de Asuntos Exteriores palestino, Riyad Najeeb al-Maliki, izquierda, habla con el jefe de política exterior de la Unión Europea, Josep Borrell, durante una reunión de ministros de Asuntos Exteriores de la UE en el edificio del Consejo Europeo en Bruselas, el lunes 22 de enero de 2024. Los Ministros de Asuntos Exteriores de la Unión Europea se reúnen en Bruselas el lunes para discutir la situación en Oriente Medio y Ucrania. (Foto AP/Virginia Mayo, piscina)

La UE impulsa la creación de un Estado palestino, rechazando la insistencia del líder israelí de que está fuera de la mesa

A raíz del ataque de Hamás del 7 de octubre, los israelíes indignados dejaron de lado las diferencias políticas latentes durante mucho tiempo y se unieron detrás de la guerra. Más de 100 días después, están resurgiendo las divisiones y crece la ira por la conducción de la guerra por parte de Netanyahu. Las familias de los rehenes han pedido a Israel que llegue a un acuerdo con Hamas, diciendo que se está acabando el tiempo para traer a sus familiares con vida a casa.

Un alto funcionario egipcio dijo que Israel ha propuesto un alto el fuego de dos meses en el que los rehenes serían liberados a cambio de la liberación de los palestinos encarcelados por Israel y se permitiría a los principales líderes de Hamas en Gaza reubicarse en otros países.

El funcionario, que no estaba autorizado a informar a los medios y habló bajo condición de anonimato, dijo que Hamás rechazó la propuesta e insiste en que no se liberarán más rehenes hasta que Israel ponga fin a su ofensiva y se retire de Gaza. El gobierno de Israel se negó a comentar sobre las conversaciones.

Egipto y Qatar, que han mediado en acuerdos anteriores entre Israel y Hamas, estaban desarrollando una propuesta de varias etapas para tratar de cerrar las brechas, dijo el funcionario.

‘UNO DE LOS DÍAS MÁS DIFÍCILES’ PARA ISRAEL

Los reservistas israelíes estaban preparando explosivos el lunes para demoler dos edificios en las afueras del campo de refugiados de Maghazi, en el centro de Gaza, cerca de la frontera israelí, cuando un militante disparó una granada propulsada por cohete contra un tanque cercano. La explosión activó los explosivos, derrumbando ambos edificios de dos pisos sobre los soldados.

Los medios israelíes dijeron que las tropas estaban trabajando para crear una zona de amortiguación informal, de aproximadamente un kilómetro de ancho (0,6 millas) a lo largo de la frontera para evitar que militantes atacaran comunidades israelíes cerca de Gaza. El portavoz militar Daniel Hagari dijo que la misión era despejar edificios para «crear las condiciones» que permitieran a los residentes del sur regresar a sus hogares.

Estados Unidos ha dicho que se opondrá a cualquier intento de Israel de reducir el territorio de Gaza.

A lo largo de la guerra, las tropas israelíes han utilizado detonaciones controladas para destruir estructuras que, según los militares, esconden túneles de Hamás o han sido utilizadas por militantes como posiciones de tiro, una de las razones de la destrucción masiva provocada por la ofensiva terrestre. Las explosiones han destruido manzanas enteras, complejos de apartamentos, edificios gubernamentales y universidades, alimentando los temores de los palestinos de que el territorio quede inhabitable.

Según el ejército, al menos 217 soldados han muerto desde que comenzó la ofensiva terrestre a finales de octubre, incluidos tres muertos en un evento separado el lunes.

Netanyahu reconoció en las redes sociales que era “uno de los días más difíciles” de la guerra, pero prometió mantener la ofensiva.

“Estamos en medio de una guerra que está más que justificada. En esta guerra, estamos logrando grandes logros, como el cerco de Khan Younis, y también hay pérdidas muy grandes”, dijo más tarde en una declaración en video.

Israel lanzó su ofensiva después de que Hamas cruzara la frontera el 7 de octubre, matando a más de 1.200 personas y secuestrando a unas 250 más. Más de 100 fueron liberados en noviembre durante un alto el fuego de una semana.

La ofensiva ha causado muerte y destrucción generalizadas, matando al menos a 25.490 personas (en su mayoría mujeres y niños) e hiriendo a otras 63.354, según el Ministerio de Salud de Gaza. Su recuento no diferencia entre civiles y combatientes. Se estima que el 85% de los 2,3 millones de habitantes de Gaza han sido expulsados de sus hogares en una crisis humanitaria que ha dejado a una cuarta parte de la población enfrentando el hambre.

TROPAS EN LA “ZONA SEGURA”

Mientras los combates arreciaban en la vecina ciudad de Khan Younis, los testigos dijeron que en los últimos días tropas y tanques israelíes habían entrado en partes de Muwasi. Anteriormente, los militares habían dicho a los palestinos que se refugiaran en la pequeña zona rural de la costa mediterránea, diciendo que así se evitarían operaciones militares.

El lunes, las tropas irrumpieron en el hospital Al-Khair dentro de la zona y atacaron la cercana Universidad de Al-Aqsa, donde se refugiaban los desplazados, según funcionarios de salud.

El avance hizo que las familias que habían huido a la zona huyeran una vez más de los combates en otros lugares, dijo un testigo, Aseel al-Muqayed. Una calle principal “estaba muy abarrotada de personas desplazadas, difícilmente se podía encontrar un lugar sin una tienda de campaña. Ahora la zona está casi vacía”, dijo, añadiendo que había visto tanques estacionados cerca.

Al-Muqayed, de 21 años, ya ha sido desplazada varias veces desde que su familia fue evacuada del norte de Gaza. Se mudaron repetidamente, huyendo de los bombardeos (su hermano menor y un primo murieron en un ataque que afectó a uno de sus refugios) y finalmente terminaron en Khan Younis. Llegó a Muwasi hace varios días y se enteró de que allí había electricidad para cargar el teléfono de su madre, y ahora tenía miedo de mudarse.

«Durante dos noches no hemos podido dormir porque los sonidos de los tanques, los disparos y las explosiones están muy cerca», dijo.

Dentro de Khan Younis, se libraron intensos combates alrededor de los dos hospitales principales. Los bombardeos alcanzaron el cuarto piso del Hospital Al-Amal, donde un proyectil impactó en el cuarto piso, matando a una persona e hiriendo a otras 10, según Raed al-Nems, portavoz del servicio de rescate de la Media Luna Roja Palestina que dirige la instalación.

El lunes los bombardeos también alcanzaron una escuela de la ONU en la ciudad que alberga a personas desplazadas, matando al menos a seis personas, según la agencia de la ONU para los refugiados palestinos, conocida como UNRWA.

La ofensiva de Israel se ha centrado durante semanas en Khan Younis y varios campos de refugiados urbanos en el centro de Gaza, después de que el ejército afirmara haber derrotado en gran medida a Hamás en el norte.

Israel cree que los comandantes de Hamas pueden estar escondidos en túneles debajo de Khan Younis, la ciudad natal del máximo líder del grupo en Gaza, Yehya Sinwar, cuya ubicación se desconoce.

PRESIÓN PARA UN ALTO EL FUEGO

El creciente número de muertos y la terrible situación humanitaria han llevado a una creciente presión internacional sobre Israel para que reduzca la ofensiva y acepte un camino para la creación de un Estado palestino después de la guerra. Estados Unidos, que ha proporcionado ayuda militar crucial para la ofensiva, se ha sumado a esos llamamientos.

Pero Netanyahu, cuya popularidad ha caído en picado desde el 7 de octubre y cuya coalición de gobierno está en deuda con partidos de extrema derecha, ha rechazado ambas demandas.

En cambio, ha dicho que Israel necesitará ampliar sus operaciones y eventualmente tomar el control del lado de Gaza de la frontera con Egipto, un área donde alrededor de un millón de palestinos están hacinados en refugios desbordados administrados por la ONU y en extensos campamentos de tiendas de campaña.

Eso provocó una airada protesta del gobierno de Egipto, que rechazó las acusaciones israelíes de que Hamas contrabandea armas a través de la frontera fuertemente custodiada.

Diaa Rashwan, jefe del Servicio de Información Estatal de Egipto, dijo el lunes que cualquier movimiento israelí para ocupar la zona fronteriza “conduciría a una grave amenaza” a las relaciones entre los dos países, que firmaron un tratado de paz histórico hace más de cuatro décadas. Egipto también está profundamente preocupado por cualquier posible afluencia de refugiados palestinos a su península del Sinaí.

AP