Nueva subvariante del coronavirus con 36 mutaciones pone en alerta a la comunidad mundial de la salud

18 agosto 2023

En un sorprendente desarrollo en la lucha contra el coronavirus, una nueva subvariante del virus ha surgido con 36 mutaciones, lo que ha llevado a la Organización Mundial de la Salud (OMS) a clasificarla como «variante bajo monitoreo». Denominada Ómicron BA.2.86, esta subvariante ha sido detectada en pacientes de varios países, incluyendo Dinamarca, Israel, Reino Unido y Estados Unidos, según ha informado la OMS.

La OMS ha tomado esta medida a pesar de contar con solo tres secuencias genéticas de muestras de pacientes hasta el momento. La cantidad de mutaciones presentes en esta subvariante ha impulsado esta clasificación. La comunidad científica y de salud global está observando de cerca esta nueva subvariante debido a su potencial impacto en la transmisión, la gravedad de la enfermedad y la eficacia de las intervenciones actuales, como la vacunación.

Aunque inicialmente se detectó en Israel y Dinamarca, Ómicron BA.2.86 ha alcanzado ya Estados Unidos, específicamente en el estado de Michigan, lo que ha llevado a los Centros para el Control y la Prevención de Enfermedades (CDC) a realizar un seguimiento detenido. El rápido reconocimiento de esta subvariante como una «variante bajo monitoreo» por parte de la OMS es un hecho inusual, pero demuestra la urgencia y la seriedad con la que se está tomando esta situación.

Aunque todavía es prematuro determinar si esta nueva subvariante será más peligrosa que las cepas previas del virus, se sabe que posee mutaciones en regiones clave del virus que podrían permitirle evadir mejor la inmunidad adquirida a través de infecciones pasadas o la vacunación. De acuerdo con expertos en evolución viral, Ómicron BA.2.86 podría ser capaz de eludir los anticuerpos generados por variantes anteriores de primera generación, lo que plantea preocupaciones sobre su impacto en la eficacia de las vacunas existentes.

Dado que esta subvariante se ha encontrado en varios países, sugiere una capacidad de transmisión amplia y potencialmente prolongada. Los esfuerzos de los países para aumentar la detección de casos y realizar estudios genómicos más exhaustivos se han intensificado debido a la designación de «variante bajo monitoreo». La OMS ha instado a los países a aumentar las pruebas en personas con síntomas y a realizar más análisis genómicos para identificar tanto las cepas circulantes como las nuevas.

El Director General de la OMS, el Dr. Tedros Adhanom Ghebreyesus, ha señalado que, aunque la emergencia de salud pública de importancia internacional ya no está en vigor, el COVID-19 sigue siendo una amenaza global para la salud. Insta a los países a acelerar la finalización del «Acuerdo sobre Pandemias» para una respuesta más coordinada y eficaz en el futuro.

En conclusión, Ómicron BA.2.86, una nueva subvariante del coronavirus con 36 mutaciones, ha desencadenado la preocupación mundial de la comunidad de salud debido a su potencial impacto en la transmisión, gravedad y efectividad de las intervenciones existentes. Aunque todavía no se conocen todos los detalles, la rápida respuesta de la OMS y la comunidad científica subraya la importancia de una vigilancia constante y una acción coordinada para abordar los desafíos en curso del COVID-19.

Comentarios
Difundelo
Permitir Notificaciones OK No gracias