Sánchez no se plantea contactos para su investidura hasta la segunda quincena de agosto
Madrid, 25 julio .- El presidente del Gobierno en funciones, Pedro Sánchez, pretende afrontar sin prisas los contactos con otras fuerzas políticas con el fin de recabar apoyos para intentar su investidura y no se los plantea hasta la segunda quincena de agosto, después de que se constituyan el Congreso y el Senado.
La formación de las nuevas Cortes es el primer hito de la legislatura y fuentes del Ejecutivo subrayan que hay que darse tiempo, ir paso a paso y esperar primero a que se constituya el nuevo Parlamento dando protagonismo a los diversos grupos que lo van a conformar.
Por eso emplazan hasta entonces y evitan elucubrar sobre cómo podría ser una negociación con Junts, la formación de Carles Puigdemont cuya abstención sería imprescindible para que Sánchez pudiera ser investido.
De ahí que de momento se limiten a hacer hincapié en que el jefe del Ejecutivo no permitirá que se sobrepase el marco constitucional ante la condición de Junts de que, para contar con sus votos, haya amnistía y un referéndum de autodeterminación en Cataluña.
Sumar anunció el lunes que ha encargado al exportavoz de los comunes en el Congreso, Jaume Asens, que lidere las negociaciones con Junts aprovechando su buena relación con Puigdemont, pero en Moncloa niegan que pueda hablar también en nombre de Sánchez.
Sí reconocen, no obstante, la determinación de que haya esa investidura y aseguran que próximamente hablarán con todos los grupos que puedan hacerla posible.
Tras la vorágine electoral y después de que se haya celebrado este martes la última reunión del Consejo de Ministros antes del paréntesis vacacional, Sánchez se tomará en breve un descanso.
Mantendrá de momento agenda, que incluirá un despacho ordinario con el rey en el Palacio de la Zarzuela y que sustituirá al tradicional que se celebra todos los meses de agosto en el Palacio de Marivent, en Mallorca.
Las fuentes del Gobierno explican que la decisión de que no sea en Marivent esa reunión se debe a que Sánchez está en funciones y aseguran que se ha hablado y concretado con la Casa Real.
Expresan también su total respeto a las funciones de Felipe VI ante la posibilidad de que proponga como candidato a la investidura al líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, aunque no tenga los apoyos suficientes para conseguirla.
Al respecto, señalan que no se van a entrometer en esa facultad del monarca porque él es el que tiene la potestad para ello, pero recalcan que lo que está claro es que Feijóo no tiene los votos necesarios para su investidura.
No habrá comparecencia de Sánchez en Moncloa para hacer el habitual balance de mitad de año porque desde el Ejecutivo se subraya que el mejor balance ha sido el resultado electoral del pasado domingo.
Tampoco está previsto que mantenga una próxima reunión con el líder del PP, Alberto Núñez Feijóo, porque afirman que ni siquiera ha habido un emplazamiento a un futuro encuentro y Sánchez no se ha comprometido a ello.
Como diputado elegido el pasado domingo, Sánchez sí tendrá que recoger su acta en el Congreso antes de que el día 17 de agosto se constituyan las nuevas Cortes, pero es un trámite que no le obliga a pasar personalmente por la Cámara Baja.
Aunque no hay decisión oficial, el Gobierno baraja que la primera reunión del Consejo de Ministros tras unas semanas de descanso sea el 22 de agosto, aunque no descartan que finalmente pudiera retrasarse una semana más, hasta el martes 29.
Moncloa ha facilitado imágenes del inicio de la reunión celebrada este martes y en ellas se ha podido ver cómo, a su llegada, Sánchez saluda con dos besos a la vicepresidenta segunda y líder de Sumar, Yolanda Díaz, y charla de forma distendida con ella.
El calendario para la investidura puede condicionar alguna cita internacional pendiente como la comparecencia del presidente del Gobierno ante el Parlamento Europeo para exponer las prioridades de la presidencia española del Consejo de la UE.
Una comparecencia que estaba prevista para julio pero que, al coincidir con la campaña electoral, se pospuso inicialmente para el pleno de septiembre que habrá en la Eurocámara y ahora sigue en el aire ante la evolución de los acontecimientos para la investidura.
El PSOE negociará con “discreción” para gobernar y rechaza el referéndum en Cataluña
La vicesecretaria general del PSOE, María Jesús Montero, ha dicho este martes que su partido negociará con “discreción” una investidura de Pedro Sánchez como presidente tras el 23J con aquellas formaciones a favor de la “mayoría social” de España, y ha rechazado el referéndum para Cataluña y la amnistía que pide Junts.
“El PSOE siempre ha sido muy claro con esta cuestión. Somos un partido constitucionalista, cualquier cuestión que abordemos tiene que estar en ese marco constitucional”, ha comentado en una entrevista en La Ser preguntada por el referéndum y la amnistía, que son dos exigencias que Junts ha planteado para apoyar una hipotética investidura de Sánchez como presidente del Gobierno.
El PSOE quedó en segundo lugar en las elecciones generales del pasado domingo, tras el PP, pero tiene opción de seguir gobernando con el apoyo de Sumar, ERC, EH Bildu, BNG, PNV y el sí o la abstención de Junts.
Montero ha dicho que ahora la prioridad es la constitución de las Cortes el 17 de agosto, y ha confirmado que los socialistas aspirarán a presidir la Mesa del Congreso de los Diputados, pero también ha ratificado la voluntad del PSOE de negociar una investidura de Sánchez, para lo que ha pedido “discreción”.
“Para llevar una negociación a buen puerto necesitamos tener discreción. Seguiremos hablando como siempre con todos aquellos que quieran seguir desarrollando un proyecto de país donde prime la mayoría social, el interés general”, ha declarado.