Santiago con su conjunto patrimonial es una marca cultural-país (III)

La República Dominicana, reconocida por su atractivo turismo de sol y playa, ahora busca potenciar dos pilares fundamentales: el turismo cultural y el eco-turismo. Estas formas de turismo, con un impacto significativo en comunidades rurales y ciudades del interior, requieren un impulso integral que abarque narrativa, eventos culturales, espacios, infraestructura y participación activa de la industria cultural.

En entregas anteriores, exploramos la riqueza natural e histórico-cultural de la ciudad de Santiago y su entorno, identificándola como un tesoro que podría ser clave para el desarrollo del turismo cultural sostenible en la región del Cibao. La Ruta de Colón, revelada como un instrumento para atraer el turismo histórico-cultural, abrió la puerta a una serie de propuestas que buscan la puesta en valor de estos tesoros (ver artículo anterior en Enlace).

El Dr. Julio Cuevas destaca en un artículo adicional la necesidad de inversiones por parte de los sectores privado y estatal para la valorización de los espacios culturales. Este llamado a la acción se alinea con las propuestas que se están formulando para impulsar la industria cultural en Santiago y el Cibao.

Santiago, fundada por Cristóbal Colón en 1495 a orillas del río Yaque, ha vivido una historia única, marcada por eventos catastróficos, incluyendo terremotos y destrucciones. La Ruta de Colón nos conecta con el primer Santiago de América, el cuarto asentamiento humano del continente.

El parque eco-arqueológico de Santiago Viejo en Jacagua y la revitalización histórica cultural de la ciudad se presentan como elementos cruciales dentro del patrimonio natural, material e inmaterial, contribuyendo al desarrollo del turismo cultural.

El conjunto patrimonial de Santiago, con sus íconos de proyección mundial como el merengue, la bachata, el tabaco, el ron, el ámbar y el primer Santiago de América, lo posiciona como una auténtica marca cultural-país. Además, Santiago ha sido cuna de la mayoría de las universidades privadas dominicanas.

Durante el período colonial, Santiago fue el guardián y la defensa norte del país, enfrentándose a ataques de piratas, franceses, españoles y haitianos con valentía y a un alto precio. Se ha levantado de las ruinas dejadas por terremotos, incendios y genocidios, y en futuros artículos, exploraremos la narrativa cultural que rodea estos eventos.

Acciones Requeridas para Impulsar la Industria Cultural de Santiago:

  1. Identificación y elaboración de un modelo y programa anual de eventos culturales vinculados a la Agenda Cultural de Desarrollo (ACD) para posicionar a Santiago como una marca cultural.
  2. Elaboración de un Plan Integral de Negocios Sostenibles (PINS), en consenso con los actores de la industria cultural, para garantizar la sostenibilidad financiera del modelo cultural.
  3. Identificación de fondos para financiar el programa de eventos y el plan integral de negocios.
  4. Propuesta, mediante consenso, de una estructura organizativa para operar el conjunto del patrimonio cultural y natural.
  5. Identificación y realización de estudios adicionales para la sostenibilidad y mantenimiento del modelo cultural que fortalezcan la identidad cultural de Santiago.

Con estas acciones, Santiago se posiciona para convertirse en un destino cultural de renombre, contribuyendo al crecimiento y sostenibilidad de la industria y el turismo cultural en la República Dominicana.

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