Tenemos una actualización sobre la historia del «Covid rojo».

Por David Leonhardt

The New York Times

Barnegat Light, Nueva Jersey

Karsten Moran para The New York Times

Todavía creciendo, más lentamente

El condado de Ocean, en el centro de Nueva Jersey, es una mezcla de pueblos costeros como Barnegat Light y pueblos extraurbanos como Toms River y Lakewood. Los ingresos familiares en el condado superan los de EE. UU. promedio.

Sin embargo, el condado de Ocean se encuentra entre los lugares menos vacunados del noreste. Solo el 53 por ciento de los residentes han recibido al menos dos dosis de una vacuna contra el covid-19 (o una dosis de Johnson & Johnson). Solo el 26 por ciento ha recibido una vacuna de refuerzo.

La gran cantidad de residentes no vacunados en el condado de Ocean ha provocado una cantidad horrible de enfermedades y muertes por covid. Casi uno de cada 200 residentes ha muerto a causa del virus. Eso es peor que el número de víctimas en Mississippi, EE. UU. estado con la mayor cantidad de muertes por Covid per cápita, y peor que en cualquier país excepto Perú.

¿Qué explica el escepticismo sobre las vacunas en el condado de Ocean? La política, sobre todo, el condado es fuertemente republicano. Donald Trump la ganó por casi 30 puntos porcentuales en 2020, y muchos republicanos, incluidos los mayores de 65 años y vulnerables a la enfermedad grave de covid, se muestran escépticos con respecto a las vacunas.

Esta división partidista ha llevado al fenómeno del “Covid rojo” que he descrito en boletines anteriores. Hoy, tengo una actualización.

Azul, luego rojo

Primero, algunos antecedentes: en los meses iniciales de la pandemia, los casos y las muertes por covid fueron más altos en las áreas demócratas, probablemente porque albergan varios aeropuertos internacionales importantes. El virus ingresó a este país por la costa oeste y por el noreste. Pero no se quedó ahí. Al final del primer año de Covid en los EE. UU., el virus se había extendido por todo el país y no había una división partidista significativa en las muertes.

Solo después de que las vacunas estuvieron ampliamente disponibles, a principios de 2021, y los liberales estaban mucho más dispuestos a vacunarse que los conservadores, Covid se convirtió en una enfermedad desproporcionadamente republicana. Para el verano de 2021, la brecha se estaba disparando:

Datos al 13 de febrero | Fuente: base de datos del New York Times; EdisonInvestigación

Como deja en claro el gráfico, el número de víctimas ha sido aún peor en los condados donde Trump ganó por abrumadora mayoría que en los condados en los que ganó por un estrecho margen.

Este fenómeno es un ejemplo de cómo la polarización política del país ha torcido el pensamiento de las personas, incluso cuando está en juego su seguridad personal. Es una tragedia, y también prevenible.

Un nuevo estudio realizado por cuatro epidemiólogos de Harvard estima que 135.000 estadounidenses no vacunados murieron innecesariamente en los últimos seis meses del año pasado. El Texas Tribune recientemente hizo un perfil de una pareja joven no vacunada: ella pasó 139 días en cuidados intensivos; preguntó, «¿Fue mi culpa?» Ambos han sido vacunados desde entonces.

Inmunidad natural

Hay un gran nuevo desarrollo. La última vez que escribí sobre el covid rojo, en noviembre, les dije que la brecha de mortalidad partidista de mes a mes podría estar alcanzando su punto máximo, por dos razones principales.

Uno, la disponibilidad de tratamientos posteriores a la infección altamente efectivos, como Paxlovid de Pfizer, se ha expandido; si reducen las muertes, la caída puede ser más pronunciada donde el número de víctimas es mayor. Dos, el Estados Unidos rojo probablemente haya desarrollado una inmunidad más natural a la covid, a partir de infecciones anteriores, que el Estados Unidos azul, dado que muchos demócratas se han esforzado más por evitar contraer el virus.

Efectivamente, la brecha partidista en las muertes por Covid ya no crece como casi lo había sido, como se puede ver en la nueva cercanía entre estas líneas:

En los condados de Trump y Biden, un candidato obtuvo al menos el 70 por ciento de los votos; en los condados oscilantes, ambos ganaron al menos el 45 por ciento.

Durante la ola de Omicron, las muertes aumentaron menos en los condados rojos que en los condados azules o morados. La explicación más probable parece ser que la cantidad de votantes de Trump vulnerables a una enfermedad grave, que todavía era muy grande a principios del año pasado, ha disminuido, porque más de ellos han desarrollado cierta inmunidad al covid a partir de una infección anterior.

Pero no cometa el error de confundir una brecha que ya no crece tan rápido como antes con una brecha que se está reduciendo. La brecha entre la América roja y la azul, en términos de muertes acumuladas de covid, sigue creciendo. La línea roja en ese segundo gráfico es más alta que la línea azul, lo que es una señal de que más republicanos que demócratas o independientes han muerto innecesariamente de covid en las últimas semanas.

Otro punto para recordar: incluso en los condados profundamente deprimidos, se está produciendo una gran cantidad de muertes entre las personas que no están vacunadas o no vacunadas. Las vacunas ofrecen una protección increíble contra un virus mortal, pero muchos estadounidenses han optado por exponerse.