Trabajadores y activistas en Asia piden más derechos laborales en marchas del 1 de mayo
SEÚL, Corea del Sur, 1 mayo — Trabajadores, activistas y otras personas celebraron el Primero de Mayo en varias capitales de Asia con desfiles y marchas para pedir mejores condiciones de trabajo y más derechos laborales.
El Primero de Mayo se celebra en muchos países como Día del Trabajo. Los actos también ofrecen a muchos la oportunidad de exponer reclamaciones económicas o políticas más generales.
En Seúl, la capital de Corea del Sur, miles de trabajadores cantaron, ondearon banderas y corearon lemas sindicales al inicio de su marcha el miércoles. Los organizadores dijeron que su prioridad era criticar lo que describieron como políticas contrarias a los trabajadores impulsadas por el gobierno conservador liderado por el presiden Yoon Suk Yeol.
“En los dos últimos años, bajo el gobierno de Yoon Suk Yeol, las vidas de nuestros trabajadores se han sumido en la desesperación”, dijo en un discurso Yang Kyung-soo, líder de la Confederación Coreana de Sindicatos, que organizó la marcha. “No podemos ignorar al gobierno de Yoon Suk Yeol. Les derrocaremos del poder nosotros mismos”.
Responsables de la agrupación sindical dijeron que había convocadas marchas similares en más de 10 puntos del país. Los miembros del grupo condenaron la decisión de Yoon de vetar en diciembre una ley para limitar los derechos de las compañías a pedir compensaciones causadas por huelgas. También acusan al gobierno de gestionar de forma demasiado agresiva las huelgas de camioneros de 2022 y de insultar a los trabajadores de la construcción que según las autoridades participaban en supuestas actividades irregulares.
La policía indicó que movilizaría a miles de agentes para mantener el orden, y señaló en un comunicado que respondería con dureza a cualquier actividad ilegal como invadir las calles.
En la capital de Filipinas, Manila, cientos de trabajadores y activistas de izquierdas marcharon bajo un calor abrasador para reclamar subidas salariales y seguridad laboral, ante la importante subida de los precios de la comida y el combustible.
La policía antidisturbios impidió a los trabajadores que protestaban acercarse al palacio presidencial. Ondeando banderas rojas y carteles con mensajes como “Queremos trabajar para vivir, no para morir” y “Precios más bajos, suban los salarios”, los inconformes caminaron por la calle, corearon lemas y ofrecieron discursos sobre las dificultades que enfrentan los trabajadores filipinos.
Conductores humildes se sumaron a la protesta y pidieron que el gobierno abandone un plan de modernización que temen termine retirando de las calles de Manila sus jeepneys, unos vehículos anticuados y que son una importante forma de transporte público.
Se esperaban marchas similares del Primero de Mayo en otras ciudades asiáticas y europeas.AP