Tucker Carlson sale en Fox News. Además, el presidente Biden anunció su campaña para la reelección.

Por Germán López

The New York Times

Tucker CarlsonLeigh Vogel para The New York Times

Cancelado

Durante años, el presentador de Fox News, Tucker Carlson, ha enfrentado críticas por su amplificación de ideas racistas y antiinmigrantes. Pero esos problemas parecían tener poco que ver con su fallecimiento.

En cambio, una creciente lista de controversias relacionadas con la conducta de Carlson dentro y fuera del aire había comenzado a irritar a los ejecutivos de Fox News, y ayer la cadena anunció abruptamente su partida.

Los líderes y colaboradores de la red se habían quejado, y algunos renunciaron, por la cobertura engañosa de Carlson de los ataques del 6 de enero, en la que describió a los alborotadores como espectadores “en su mayoría pacíficos”. Su cobertura de las teorías de conspiración para las elecciones de 2020 fue parte de la demanda de Dominion Voting Systems contra Fox, que la red resolvió la semana pasada. Carlson también había denigrado en privado a los ejecutivos de Fox, diciendo que le habían costado credibilidad a la red al permitirle llamar a la victoria electoral del presidente Biden, como informó The Washington Post.

Y un ex productor acusó recientemente a Carlson en una demanda de supervisar un lugar de trabajo misógino y discriminatorio. Fox ha cuestionado sus afirmaciones.

Como uno de los principales presentadores de la red de noticias por cable más vista, Carlson desempeñó un papel importante en la política conservadora. El boletín de hoy analizará la influencia de Carlson y lo que significa su salida para Fox News.

Una gran audiencia

Carlson se hizo cargo del preciado programa de las 8 p.m. de Fox News. en 2017 y aumentó sus índices de audiencia ya altos, convirtiéndose rápidamente en un elemento fijo en la red de derecha y en la política conservadora.

¿Cómo? Carlson aprovechó los temores de los espectadores blancos sobre la demografía racial cambiante del país, que impulsó el ascenso de Donald Trump en las elecciones de 2016. Regularmente se enfocaba en la noción del «gran reemplazo», una teoría de conspiración racista que afirma que las élites están importando inmigrantes supuestamente obedientes para desempoderar a los estadounidenses nativos. En 2018, Carlson argumentó que las hordas de inmigrantes estaban haciendo a Estados Unidos “más pobre y sucio”.

Carlson a menudo destacaba noticias locales, pero las tergiversaba para hacer afirmaciones más amplias sobre la pérdida de control de su país por parte de los estadounidenses. En un segmento de 2017, afirmó que los “gitanos” estaban causando caos en un pequeño pueblo de Pensilvania, orinando y defecando en las calles.

“El mensaje de estos segmentos siempre fue el mismo: usted y su forma de vida están bajo ataque, y las personas que atacan se ven diferentes y tienen valores diferentes a los suyos”, mi colega Nicholas Confessore, quien cubrió el ascenso de Carlson para The Times. , me dijo ayer. “Carlson aseguró a los espectadores que su incomodidad era razonable, que no tenían que sentirse mal por sus miedos y preocupaciones”.

Carlson lo hizo al abrazar el trumpismo pero no al propio Trump. El enfoque fue en parte personal. En mensajes de texto privados, Carlson dijo de Trump: “Lo odio apasionadamente”. También ayudó a Carlson a diferenciarse de otros presentadores de Fox News, dijo Nicholas. Debido a que se alinearon estrechamente con Trump, los anfitriones Sean Hannity y Laura Ingraham a menudo tenían que salir en su defensa cuando Trump decía algo escandaloso. Carlson trató de evitar esas trampas enfocándose en el mensaje subyacente en lugar de Trump como la cara pública del mismo.

La audiencia predominantemente blanca de Fox abrazó el enfoque de Carlson, y él atrajo a más de tres millones de espectadores por noche, convirtiendo regularmente su programa en el número 1 o número 2 en la cadena. Y aunque las acusaciones de intolerancia y falsedades llevaron a los patrocinadores a huir de Fox, el programa de Carlson aumentó sus ingresos publicitarios porque su audiencia era muy grande.

Carlson no ha dicho qué hará a continuación. Pero sin esa gran audiencia, probablemente no será tan influyente.

Futuro incierto

Fox News dijo que rotaría los anfitriones en su horario de 8 p.m. ranura hasta que pudiera encontrar un reemplazo permanente. A primera vista, esto parece malo para la red: no solo perdió a una de sus estrellas más importantes, sino que no tiene un reemplazo en fila. Y el anuncio llega en un momento en que Fox ya ha enfrentado meses de mala publicidad, y acaba de aceptar un acuerdo de $787.5 millones por la demanda de Dominion.

Pero Fox ha superado desafíos similares con sus anfitriones antes. El propio Carlson reemplazó a Bill O’Reilly, quien alguna vez fue el presentador más popular de la cadena, y no solo mantuvo las calificaciones de O’Reilly, sino que en ocasiones las superó. Esa experiencia puede haber llevado a Fox a creer que la red tiene más influencia sobre sus espectadores que los presentadores individuales.

El ex ejecutivo de Fox, Roger Ailes, ocasionalmente colocaba en la banca a sus estrellas del horario de máxima audiencia durante una noche para mostrarles que los índices de audiencia se mantuvieron altos cuando no estaban, lo que demuestra que fue Fox quien los hizo grandes, señaló Nicholas. “Sospecho que la lealtad de la audiencia hacia Fox es probablemente mayor que la lealtad de la audiencia hacia cualquier estrella de Fox en particular”, agregó.