Aaron Judge domina la Liga Americana al liderar ocho categorías ofensivas en 2025

Nueva York, 30 de septiembre de 2025. — Aunque no logró repetir la hazaña de obtener la triple corona del béisbol, el jardinero estelar de los New York Yankees, Aaron Judge, cerró la temporada 2025 de las Grandes Ligas liderando ocho departamentos ofensivos de bateo en la Liga Americana, consolidando así su estatus como uno de los bateadores más temidos y consistentes del béisbol profesional.

Judge, quien se perdió 10 partidos en la campaña regular debido a una lesión, terminó con un impresionante promedio de bateo de .331, encabezando el circuito joven con una ventaja de 20 puntos sobre sus más cercanos competidores: Bo Bichette y el novato Jacob Wilson, ambos con .311.

Dominio estadístico a pesar de la ausencia de la triple corona

Durante la primera mitad de la temporada, Judge coqueteó con la posibilidad de lograr la triple corona, una hazaña que combina el liderato en promedio de bateo, jonrones y carreras producidas. Sin embargo, en la recta final fue superado en estos dos últimos departamentos por el receptor de los Seattle Mariners, Cal Raleigh, quien tuvo una campaña histórica.

Raleigh concluyó la temporada con 60 cuadrangulares y 125 carreras impulsadas, superando los 53 jonrones y 114 producidas de Judge, quien de todos modos dejó cifras que lo colocan como uno de los jugadores más completos del béisbol actual.

Líder en ocho departamentos ofensivos

Aaron Judge, en 152 juegos disputados, se las arregló para dominar las siguientes categorías ofensivas de la Liga Americana:

• Promedio de bateo: .331
• Porcentaje de embasarse (OBP): .457 (muy por encima del .399 de George Springer)
• Slugging: .688 (99 puntos más que Cal Raleigh)
• OPS: 1.145
• Bases por bolas recibidas: 124 (único jugador con más de 100)
• Extrabases: 85 (uno más que Raleigh)
• Total de bases: 372
• Carreras anotadas: 137

Este rendimiento remite al de la temporada 2024, cuando Judge lideró también en ocho categorías ofensivas, incluidas jonrones (58) y carreras impulsadas (144). En ese entonces, quedó tercero en promedio de bateo con .322, apenas diez puntos por debajo del campeón Bobby Witt Jr., quien bateó .332.

En contraste, en 2023, Judge tuvo una campaña más discreta debido a las lesiones que lo limitaron a 106 partidos, y no figuró en ningún liderato ofensivo. Ese año, Shohei Ohtani, en su última campaña con los Los Ángeles Angels, dominó seis categorías ofensivas.

Temporada histórica para Cal Raleigh

Pese a no figurar en más lideratos, Cal Raleigh fue la gran revelación ofensiva del año. Con sus 60 jonrones, estableció un récord histórico para un receptor en una temporada, además de marcar la mejor cifra para un bateador ambidiestro y para un jugador de los Seattle Mariners en toda su historia.

Raleigh también se convirtió en el primer pelotero de los Mariners en liderar en carreras impulsadas (125) desde que el dominicano Nelson Cruz lo hiciera en 2017. En apenas su quinta campaña en las Mayores, Raleigh ha acumulado 152 jonrones en sus últimas cuatro temporadas, mostrando una notable evolución ofensiva.

Otros líderes ofensivos de 2025

• Bobby Witt Jr., de los Kansas City Royals, repitió como líder en hits conectados (184), superando por cinco a Aaron Judge. También lideró en dobletes, con un total de 47.
• El mexicoamericano Jarren Durán se adjudicó el liderato en triples, con 13.
• El panameño José Caballero, jugando para los Tampa Bay Rays y los Yankees, fue el mejor en bases robadas, con 49.

Perspectivas para 2026

Con una nueva campaña a la vista, Aaron Judge reafirma su condición de pilar ofensivo de los Yankees y de toda la Liga Americana. Aunque no se quedó con la triple corona, su dominio en múltiples categorías lo posiciona nuevamente como candidato firme al premio de Jugador Más Valioso (MVP).

Los Yankees, en proceso de ajustes tras no clasificar a la postemporada, tendrán en Judge a su principal figura para reconstruir aspiraciones en 2026. Mientras tanto, jugadores como Raleigh y Witt Jr. consolidan una nueva generación ofensiva que amenaza con redefinir el panorama competitivo de las Grandes Ligas.