Nivel adecuado de las reservas internacionales dominicanas
Haivanjoe Ng Cortiñas
A diferencia de otras constituciones de Latinoamérica, la de República Dominicana no se pronuncia en cuanto al organismo del Estado que debe velar por el manejo de las reservas internacionales, el marco legal que lo hace es la Ley Monetaria y Financiera, número 183-02, que en su Art. 31 señala de manera explícita que, “El Banco Central procurará mantener un nivel adecuado de reservas internacionales, con el objetivo de promover la estabilidad monetaria y la confianza en las políticas macroeconómicas. La administración de dichas reservas se centrará en los criterios de seguridad, liquidez y rentabilidad, a los fines de preservar el valor de las mismas dentro del objetivo de la política monetaria”.
La importancia de las reservas internacionales es clave para el manejo monetario de la economía, derivándose en que son el soporte de los compromisos externos del país apoyando a las compras que realizan los agentes económicos al resto del mundo, en particular en la parte liquida de las mismas, para respaldar los retiros que realizan las entidades financieras en el Banco Central, también, para la estabilidad cambiaria -ante un mercado volátil con signos de especulación-, inyectando divisas al mercado y, para darle confianza a los agentes económicos y público en general, de que el gobierno dispone de reservas para hacerle frente a sus obligaciones.
Apréciese que el referido artículo habla de nivel adecuado de las reservas y no del óptimo, sobre los que no hay consenso para construir una métrica para las economías con distintos niveles de desarrollo, aunque si se sugiere un conjunto de indicadores que permiten ayudar a valorar su monto en el tiempo para poder cumplir con los compromisos del sector empresarial, del gobierno y los ciudadanos.
Entonces nos referimos a que un nivel adecuado de reservas internacionales procura ofrecer cobertura ante eventuales hechos que interrumpan las fuentes de divisas, como son las exportaciones, el turismo, las remesas, dificultades para acceder a los financiamientos y la inversión extranjera.
Al iniciar el año 2023 las autoridades monetarias dieron a conocer el nivel en que cerraron las reservas internacionales netas de 2022, destacándolo como el más alto de la historia económica dominicana, motivo como para celebrarlo. El monto de los indicados activos financieros en divisas ascendió a US$ 14,436.50 millones y su evolución en valores absolutos es como el que puede verse en el cuadro, en donde para el año 2015 era de US$ 5,195 millones y para finales de 2022, como el monto indicado más arriba, mostrando que cubre con suficiente holgura los compromisos financieros externos de corto plazo del gobierno central, que para el 2023 superan los US$ 3,766 millones y también, a la base monetaria sobre el 100.0 %.
Año/Indicador | 2015 | 2016 | 2017 | 2018 | 2019 | 2020 | 2021 | 2022 |
RIN, millones US$ | 5,195 | 6,046 | 6,780 | 7,627 | 8,781 | 10,751 | 13,033 | 14,436 |
RIN/Servicio deuda externa | 2.69 | 3.19 | 1.88 | 3.88 | 3.52 | 2.92 | 5.85 | 3.19* |
RIN/Amortización deuda externa | 5.21 | 6.78 | 11.4 | 8.77 | 7.44 | 4.73 | 23.8 | 21.4* |
RIN/Amortización + déficit cuenta corriente | 2.28 | 3.54 | 3.49 | 4.0 | 2.99 | 4.0 | 1.58* | |
RIN/PIB, % | 7.3 | 7.9 | 8.5 | 8.9 | 10.3 | 13.6 | 13.8 | 12.7 |
RIN/Import. | 3.69 | 4.0 | 4.60 | 4.53 | 5.20 | 7.54 | 6.47 | 5.61* |
Fuente: web Banco Central y Dirección General de Crédito Público. * Preliminar
Puede apreciarse en el cuadro que aparece en esta opinión, el bloque de indicadores asociados a la evolución de las reservas internacionales, que muestra un cómodo respaldo de los activos financieros en dólares de la economía dominicana, al superar cado uno de ellos la unidad, e incluso, superarla en forma significativa, aunque los movimientos son zigzagueantes. En el caso del indicador de las reservas sobre el PIB, presenta una tendencia creciente, al pasar de un 7.3 % en el año 2015 a un 12.7 % para el 2022 y muestra que alcanza más de un 10.0 % del PIB que recomienda el Fondo Monetario Internacional y por el lado de los meses que cubre a las importaciones, de manera holgada tiene un soporte a las importaciones mensuales, superando en los últimos 4 años 5 meses de compras al exterior, de manera que cumple en forma holgada con el parámetro de cubrir 3 meses de importación. .
Los montos cada vez más crecientes de las reservas internacionales de la economía dominicana, es una muestra de la fortaleza de los sectores que generan divisas y la motorizan, como las exportaciones, turismo, remesas e inversión extranjera; de ahí que, las indicadas reservas presentan una cobertura en líneas generales creciente, así, además, la que cubre las amortizaciones de la deuda externa, en contraposición al indicador de las reservas que relacionada con la amortización y el déficit de la cuenta corriente de la balanza de pagos, que muestra un movimiento bien irregular, incluso, a nivel de deterioro para el año 2022 con 1.58.
En lo que tiene que ver con reportes periódicos sobre la gerencia de las reservas internacionales dominicanas, la entidad responsable no publica informes que de cuenta de su manejo en lo relativo a la composición de su portafolio, cuántos se mantienen en efectivo y qué porcentaje corresponden a inversiones, sus tasas de interés, así como además, la medición de los distintos tipos de riesgos, el de mercado, de liquidez, el cambiario, entre otros, como manera de acercarnos a los costos y beneficios que se derivan de la gestión de los activos financieros internacionales del Banco Central, una manera de determinar si la gestión está conservando su valor o teniendo ganancias.
El dato de las reservas internacionales netas al cierre de 2022, ofrecido por el Banco Central, es una muestra de la robustes que han venido presentando los sectores que generan divisas en la República Dominicana, al tiempo de fortalecer el atractivo del país como destino de la inversión extranjera, así como de estabilidad cambiaria y proyecta además, una situación vigorosa de los distintos indicadores asociados a la importancia de disponer una posición solida en materia de sus activos financieros en divisas y cumplir con los compromisos externos, por lo que, por su lado no existe riesgo soberano.