Optimizando la educación universitaria en República Dominicana
Por Manuel Jiménez
El gobierno dominicano contempló hace tiempo la apertura de centros regionales universitarios como parte de una estrategia para descongestionar el campus central de la Universidad Autónoma de Santo Domingo (UASD) y satisfacer la creciente demanda de formación académica en todo el país. Sin embargo, es importante distinguir entre los centros académicos regionales y los municipales para abordar adecuadamente este desafío.
Los centros académicos regionales se conciben como instituciones estratégicamente distribuidas en diversas regiones del país, con el objetivo de acercar la educación superior a los estudiantes sin obligarlos a desplazarse por largas distancias. Esta iniciativa busca garantizar que el recurso docente sea de calidad y que las carreras académicas se adapten al perfil de cada región, evitando la dispersión de recursos económicos y formando profesionales que puedan insertarse eficazmente en el aparato productivo local.
Es aconsejable realizar un análisis exhaustivo de la demanda educativa en cada municipio o región para determinar la necesidad de nuevos centros académicos y los programas de estudio requeridos. Asimismo, se debe evaluar la accesibilidad geográfica de los municipios y la disponibilidad de infraestructura educativa existente, así como la capacidad para expandirla o mejorarla según sea necesario.
La disponibilidad de personal docente calificado es otro factor a considerar para el funcionamiento de los centros académicos. Se debe evaluar la capacidad de reclutar y retener a docentes competentes en cada ubicación, teniendo en cuenta las necesidades y características específicas de cada municipio o región.
En este sentido, los centros académicos regionales son una estrategia más eficiente que los individuales en cada municipio, ya que permitirían optimizar recursos y ofrecer una educación de calidad de manera más efectiva. Al concentrar recursos en centros regionales, se facilitaría la captación de personal docente calificado y la coordinación de programas educativos.
Respecto a la capacidad de la UASD para reunir docentes de calidad en cada uno de sus centros, esto dependerá de varios factores, incluyendo la disponibilidad de profesionales capacitados en las áreas de estudio correspondientes y la capacidad presupuestaria. Si bien la UASD cuenta con una larga trayectoria en la formación de profesionales, es fundamental garantizar que se mantenga y mejore constantemente la calidad de la enseñanza en todos sus centros.
La apertura de centros académicos regionales debe seguir siendo priorizada por el Estado como una iniciativa prometedora que debe abordarse con planificación cuidadosa. Es importante evitar la apertura indiscriminada de recintos académicos en cada municipio, ya que esto podría generar dispersión de recursos y afectar la calidad educativa. En cambio, debemos concentrar nuestros esfuerzos en la creación de centros regionales de excelencia que puedan satisfacer las necesidades educativas de la población estudiantil de manera eficiente y equitativa.
