Ricos y poderosos españoles a la conquista de El Dorado dominicano
GRACIANO PALOMO
La isla caribeña se ha convertido en el destino preferido de empresarios y ex políticos españoles para desconectar pero también para hacer negocios.
530 años después las carabelas anclan de nuevo en La Española, como fue bautizada por Colón República Dominicana. Este territorio americano de 50.000 kilómetros cuadrados y 11 millones de habitantes, situado en plenas Antillas, se ha convertido en el destino preferido de ex políticos y empresarios españoles de postín, como Juan José Hidalgo, el más conocido, aunque no el más poderoso.
Precisamente fue Hidalgo el descubridor de esta perla del Caribe donde han recalado grandes hoteleros: Simón Pedro Barceló, Gabriel Escarrer, Matutes, Fluxá, Riu… Uno de los primeros fue Jesús Barderas, amigo de Enrique Sarasola, íntimo, a su vez del entonces presidente Felipe González. Entre los tres se cuajó una gran amistad. Luego fueron llegando muchos empresarios más, desde Tomás Olivo, con sus infraestructuras en centros comerciales, a Carlos Sánchez, ambos en los legajos de la Malaya marbellí. La familia Domecq también tiene a uno de sus miembros como asiduo al sol caribeño dominicano.
Pero hay multimillonarios desconocidos de Cantabria, Andalucía, Asturias o Castilla y León; o simplemente jubilados de lujo; las sociedades pagan impuestos pero las personas físicas con seis meses de residencia, no. La nacionalidad se suele otorgar a ex políticos y poderosos económicamente.
Uno de los últimos grandes empresarios en descubrir las posibilidades de la isla ha sido Arturo de las Heras, consejero delegado del grupo educativo universitario UDIMA/CEF con más de 12.000 alumnos en todo el mundo del área hispana. Es él quien explica cuáles son las razones por las que el país ejerce como un imán sobre tantos empresarios españoles. «República Dominicana ofrece estabilidad política, que permite a su vez estabilidad económica para el inversor y, a la vez, gozar de seguridad jurídica…Además, la República Dominicana tiene un crecimiento ininterrumpido de su PIB gracias, entre otras cosas, a la gran cantidad de dinero que llega de su inmigración», asegura. Sólo en Estados Unidos viven dos millones de dominicanos y en España, casi 200.000
Y añade: «Finalmente, estaría la enorme simpatía con la que son acogidos los españoles en esta tierra; aquí España es la madre patria, no la madrastra, como nos pintan en otros países iberoamericanos».
EL CASO BONO
Hace ya algunos años que José Bonopasa largas temporadas en República Dominicana, sobre todo después de que su amigo Luis Abinader accediera en 2020 a la Presidencia de la nación. Le conoció durante unas reuniones de la Internacional Socialista y Bono aceptó la oferta para convertirse en su asesor especial.
José Bono suele pasar largas temporadas en República Dominicana.
Según fuentes próximas a Palacio (así se llama en Santo Domingo al lugar de trabajo del presidente) se trata de un cargo remunerado o «muy bien remunerado». El manchego colocó a dos personas de su confianza en el entorno presidencial. Uno de ellos es Juan Segovia (40), ex diputado autonómico madrileño, jefe de las Juventudes Socialistas en Madrid, que fue valedor en su día de Susana Díaz frente a Sánchez. El otro es Alberto Muiños, nombrado asesor del gabinete de Abinader. Los dos son los ojos y oídos de Bono en el centro del poder dominicano.
FELIPE GONZÁLEZ
Hace cinco meses Abinader se congratulaba de entregar en el Palacio Nacional y en un acto solemne la «nacionalidad dominicana» a título de «naturalización privilegiada» al ex presidente español que, en palabras de su anfitrión, «transformó la realidad de su país durante sus catorce años de gobierno…» Algunos han interpretado en España como un intento de González por ahorrarse dinero en impuestos, pero «la realidad es que Felipe viene muy poco por aquí», subraya una fuente próxima al poder gubernamental caribeño. «Cierto es que cuenta con muchos amigos que se han instalado entre nosotros, pero no se puede afirmar que pese a su reciente nacionalidad se haya instalado entre nosotros… Viene porque tiene conocidos que le invitan a sus casas, tanto españoles como dominicanos», añade.
El país que tanto atrae a los empresarios españoles está dominado básicamente por cinco grandes familias: Vicini, Corripio, Rainieri, los Martí, multimillonarios de origen español, y los González Cuadra, hijos de emigrantes españoles, conocido por sus supermercados y centros comerciales.
Todos ellos tratan de evitar el desmadre de un país clave en esa área del mundo. Ya han empezado a tener éxito en la importación de profesionales españoles (arquitectos, ingenieros, médicos, informáticos…) que dan valor añadido.
Publicado en El Mundo (España)